Miles de cubanos han salido a las calles desde el pasado domingo para llevar a cabo unas históricas protestas contra el gobierno comunista, en medio de una crisis de escasez de alimentos, altos precios y aumento de contagios de covid-19 en la isla. Sin embargo, los abusos de las autoridades contra los manifestantes pacíficos no se han hecho esperar.

Recientemente se conoció un video compartido a través de redes sociales por Yusnaby Pérez, periodista y activista por los derechos humanos en Cuba, en el que se evidencia la manera en que agentes de seguridad de la isla emboscan y golpean en repetidas ocasiones a una persona desarmada que se encontraba en el techo de un edificio.

Las imágenes han sido difundidas de forma viral y han generado rechazo entre los cibernautas debido al actuar de las fuerzas de seguridad. “El régimen castrista activó su máxima represión contra manifestantes pacíficos desarmados. El mundo no puede callar ante los gritos de libertad de los cubanos que quieren ser silenciados”, aseguró el periodista en la descripción del video.

El gobierno de Estados Unidos, por ejemplo, advirtió recientemente a las autoridades cubanas sobre el uso de la violencia contra manifestantes pacíficos. “Estados Unidos apoya la libertad de expresión y reunión en Cuba y condenaría fuertemente cualquier uso de la violencia contra manifestantes pacíficos que están ejerciendo de sus derechos universales”, señaló el pasado lunes en Twitter el asesor de Seguridad Nacional del gobierno estadounidense, Jake Sullivan.

Desde Norteamérica también instaron a ponerles fin a las restricciones de internet e insistieron en el pedido de liberación de los manifestantes detenidos. “Hacemos un llamado a los líderes de Cuba para que demuestren moderación (y) respeto por la voz del pueblo, abriendo todos los medios de comunicación, tanto digitales como no digitales”, aseguró en rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.

(AP Photo/Eliana Aponte, file) | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved

En el marco de las manifestaciones cerca de un centenar de personas, incluidos periodistas independientes y activistas de la oposición, fueron detenidos y permanecen privados de la libertad.

La crisis en Cuba se ha agudizado por cuenta de la escasez de alimentos y medicinas, sumado a los cortes diarios de electricidad y el repunte en los contagios de coronavirus en la isla. No obstante, el presidente Miguel Díaz-Canel ha asegurado que detrás de la coyuntura hay un plan orquestado desde los Estados Unidos.

“Hay un grupo de gente, contrarevolucionaria, mercenaria, pagada por el gobierno de los Estados Unidos, pagada indirectamente a través de agencias del gobierno de Estados Unidos para armar este tipo de manifestaciones”, afirmó el mandatario cubano.

El acceso a internet móvil, por su parte, también fue rápidamente interrumpido por el régimen para que no se convirtiera en una herramienta expansiva de las protestas. El grupo de monitoreo de internet Netblocks reportó interrupciones en Cuba en las principales redes sociales como WhatsApp y Facebook.

Las protestas también han representado un catalizador de un nuevo enfrentamiento entre Washington y Moscú. Mientras desde Norteamérica apoyan las manifestaciones, en Rusia han dicho que se oponen a “cualquier injerencia extranjera”, como recoge AFP.

“Consideramos inaceptable cualquier injerencia externa en los asuntos internos de un Estado soberano y toda acción destructiva que favorezca la desestabilización de la situación en la isla”, indicó en un comunicado la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zajárova.

(AP Photo/Eliana Aponte) | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved

Por su parte, las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos atraviesan su nivel de mayor tensión desde que el expresidente estadounidense Donald Trump endureció el embargo en vigor desde 1962, argumentando que desde Cuba se cometen violaciones de derechos humanos y se brinda apoyo al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.

Estas sanciones, así como la ausencia de turistas debido a la pandemia, han sumido a Cuba en una profunda crisis económica y han generado un fuerte malestar social.