La multinacional de ropa deportiva Adidas se encuentra en una encrucijada por cuenta de la ruptura de las relaciones comerciales con el rapero Kanye West, a quien en octubre pasado despidió luego de que el artista realizara una serie de declaraciones antisemitas en sus redes sociales.

El problema para la compañía está relacionado con la línea de calzado Yessy, la cual fue hecha en colaboración con el cantante; según Bjorn Gulden, director ejecutivo de la marca de las tres líneas, sacar a las vitrinas los ejemplares de esa colección, le implicaría a la compañía tener que reconocerle regalías al artista, por lo que no saben qué hacer con la mercancía que tienen almacenada y la cual equivale a 1.300 millones de dólares.

El ejecutivo señaló que vienen analizando diferentes opciones para poder mover esa gran cantidad de calzado que tienen represada en bodegas y almacenes; sin embargo, no es tan fácil dar un destino a inmenso inventario que se quedó represado.

La compañía tiene represado un gigantesco inventario de la línea Yezzy, hecha en colaboración con el artista. | Foto: Copyright 2022 The Associated Press. All rights reserved.

Gulden señaló que destruirlos puede significar problemas de “sustentabilidad” y que regalarlos en regiones afectadas por la guerra y los desastres naturales como Siria y Turquía no sería una buena opción, pues el elevado valor de los zapatos podría generar que estos sean revendidos.

El alto ejecutivo agregó que la alternativa más viable sería donar las ganancias, pues en entregarlos en donación podría elevar mucho más el precio del calzado en el mercado de los coleccionistas o fanáticos al cantante.

El rompimiento de relaciones entre la compañía y West le significó a Adidas un golpe de 600 millones de euros en el último trimestre de 2022, situación que deja mal parada a la empresa, pues la colección con el artista representaba cerca del 15 % de sus ingresos anuales. Por esta razón, la multinacional está buscando estrategias para evitar que el impacto en las ventas en 2023 sea catastrófico, pues las proyecciones muestran que dejarán de recibir cerca de 500 millones de euros por ventas.

La empresa tendrá que definir si reutiliza los zapatos o los vende a la industria del reciclaje, esto como medida para mermar el golpe que significó el final de esta alianza comercial y que deja ver un panorama duro en el que se tiene contemplado pérdidas operativas por 700 millones de euros, según el propio Gulden.

Kanye West recibe demanda por discriminación racial en su escuela Donda Academy

El rapero Kanye West venía pasando desapercibido durante este 2023 luego de todo un huracán de críticas y polémicas generadas por sus ideologías antisemitas y sus comentarios incendiarios contra los judíos en las redes sociales, que no solo le valieron la censura total en Twitter e Instagram, sino un efecto dominó de contratos cancelados con marcas de renombre como Balenciaga y Adidas, entre muchas otras, que prefirieron romper todo tipo de conexión con el cantante antes de ser relacionadas con sus fatídicas palabras de odio y discriminación.

La cuenta de Instagram de Kanye West fue restringida después de hacer una publicación antisemita | Foto: Instagram @kanyethegoatwest

El dinero que Kanye dejó de recibir en tan solo meses lo bajó del ranking de multimillonario y, al final, solo y sin quién lo apoyara, West incluso llegó al punto de retractarse y afirmar que ya había dejado de ser antisemita, todo gracias a una película: “Ver a Jonah Hill en 21 Jump Street hizo que me gustaran de nuevo los judíos. Nadie debería tomar la ira contra uno o dos individuos y transformarla en odio hacia millones de personas inocentes… Ningún cristiano puede ser etiquetado de antisemita sabiendo que Jesús es judío. Gracias Jonah Hill, te quiero”, escribió en sus redes sociales, frases que también fueron fuertemente criticadas.

La marea para el artista venía más calma que de costumbre, sin embargo, ahora llegó otro tsunami por una costa de la vida de West de la que muy poco se habla, su escuela cristiana, Donda Academy, una institución académica no acreditada ubicada en Simi Valley, California, donde hay cursos desde grado primero hasta grado once y cuyos alumnos, todos uniformados por conjuntos Balenciaga creados por el rapero, pueden ver materias como cristianismo, matemáticas, ciencias y lenguaje del arte, además de tener otras extensiones extracurriculares como artes visuales, cine, un tradicional coro y hasta parkour.

La queja viene de parte de dos profesoras que trabajaban allí, Cecilia Hailey y Chekarey Byers, quienes decidieron demandar a la institución por discriminación racial, alegando que fueron despedidas injustamente luego de que ellas, siendo las únicas empleadas afrodescendientes del lugar, hicieran visibles varios procesos mal implementados en dicha institución.

Kanye West aseguró que no se iba a retractar sobre sus comentarios. | Foto: 2022 Edward Berthelot

Las mujeres afirman que los alumnos solamente tienen sushi como método de alimentación y este se les da una sola vez al día, además de que el establecimiento no cuenta con personal médico adecuado y los medicamentos de los botiquines están tirados en un cuarto útil y con fecha de vencimiento caducada. Y como si no fuera poco, tampoco hay conserje y los alumnos tienen que sentarse en cojines ubicados en todo el piso de los salones, pues ni ellos ni los profesores tienen sillas adecuadas para tomar y dar las clases.

Pero lo peor del caso es que las dos maestras afirman que sus salarios eran considerablemente bajos con respecto a sus pares no afrodescendientes, siendo el mismo West parte de esta comunidad, y que su despido se dio injustamente luego de exigir que se les pagara su salario integral homologado con el resto de empleados de la academia.

Por el momento, ni West ni la institución se han pronunciado públicamente sobre la demanda, que ya está en proceso judicial.