Todo el planeta está cansado de la pandemia y, con el paso de los días, hasta los más acérrimos gobernantes empiezan a aflojar las medidas que se implementaron para atajar al coronavirus. La vida como se conocía antes de marzo de 2020 vuelve a ser una ilusión viable.

“El mundo está hasta aquí de la covid, la gente necesita recuperar su vida”. Lo que podría ser un eslogan de las protestas en Canadá fue lo que dijo Anthony Fauci, principal asesor médico del Gobierno de Estados Unidos y creador de muchas de las medidas contra el covid en el país. Aun así, pide prudencia a la hora de relajar las condiciones de vida en la pandemia, aunque varios estados empezaron a quitar normas.

Ya son varias las naciones que se suman para flexibilizar las medidas contra la pandemia ante el descenso de casos, luego del contagio masivo que trajo la variante ómicron. Por ejemplo, Alemania decretó que a partir del 20 de marzo se dejará de pedir el pasaporte sanitario y se eliminarán los horarios de cierre de lugares de ocio, aunque se mantendrá el uso de tapabocas en interiores.

“El mundo está hasta aquí de la covid, la gente necesita recuperar su vida”, dijo Antoni Fauci, principal asesor médico de los Estados Unidos durante la pandemia. | Foto: Copyright 2021 The Associated Press. All rights reserved

Austria, por su parte, decretó que desde el 5 de marzo suprimirá la mayoría de las disposiciones contra el virus. Reabrirán los clubes nocturnos, quitarán las horas específicas de cierre y los ciudadanos no vacunados podrán asistir a restaurantes, bares y demás comercios.

Estos dos países se suman a otros que ya habían anunciado el fin de varias de las restricciones decretadas por la pandemia. Dinamarca fue la primera nación de la Unión Europea en levantarlas, argumentando que la covid ya no era una enfermedad de trascendencia nacional crítica, y quitó la obligatoriedad del uso del tapabocas en lugares públicos así sean cerrados.

Suecia, a su vez, ha relajado medidas como el toque de queda y el aforo limitado en bares y restaurantes a partir de las 11 de la noche, junto con la promesa de un regreso total a la normalidad desde el primero de abril, siempre y cuando las circunstancias sanitarias lo permitan.

Esta promesa también la hizo Francia. Su presidente, Emmanuel Macron, declaró que si había un descenso de casos importante, se reducirían las normas, como los pases sanitarios.

En Reino Unido ya entraron en vigencia unas disposiciones mucho menos estrictas, como la eliminación del pase covid para bares y restaurantes, y a los trabajadores de la salud no se les exigirá estar vacunados. Solo se pedirá inmunización a los viajeros que lleguen a la nación, dependiendo de su país de origen.

En Latinoamérica, República Dominicana es el primero en la región en eliminar las normas contra la pandemia quitando, incluso, la obligación del uso del tapabocas sin importar el lugar.

“Medidas como el uso de mascarillas, la necesidad de presentar la tarjeta de vacunación o las restricciones en espacios públicos hoy son responsabilidad individual de todos y cada uno de nosotros”, dijo el presidente Luis Abinader.

El panorama parece esperanzador. Por ahora, aunque varios de los países que pusieron fin a los protocolos de bioseguridad empiezan a ver repuntes en casos positivos, no han sido significativamente altos en hospitalizaciones y muertes para volver a imponer dichas disposiciones.

Parece cuestión de tiempo antes de que más naciones se sumen a la abolición de los mandatos anticovid y, mientras los casos sigan en descenso, será una apuesta segura. ¿Hay luz al final del túnel de la pandemia? Hoy, al menos, existen motivos para ilusionarse.