Como es normal en esta época del año, son muchas las personas en Colombia y en diferentes partes del mundo las que viajan, sobre todo en avión, para pasar los últimos días de diciembre con sus seres queridos.
Por eso, es muy común que los tiquetes en avión, para estas fechas, sean muy costosos y que los aeropuertos más importantes de cada país se mantengan con una gran presencia de viajeros. A pesar de esto, las personas que viajan esperan que su experiencia sea amena, lo más normal posible.
Pero esto, para una familia en Estados Unidos, no fue así, lamentablemente, ya que, un niño de tan solo seis años de edad, que viajaba solo, fue enviado en el vuelo equivocado. La aerolínea responsable del hecho fue Spirit Airlines.
El plan original era que el niño tomara un vuelo el jueves 21 de diciembre desde el Aeropuerto Internacional de Filadelfia con destino al Aeropuerto Internacional del Suroeste de Florida en Fort Myers. Sin embargo, la aerolínea informó que el menor fue “embarcado incorrectamente” en un vuelo con destino a Orlando.
“El niño siempre estuvo bajo el cuidado y supervisión de un miembro del equipo de Spirit, y tan pronto como descubrimos el error, tomamos medidas inmediatas para comunicarnos con la familia y reconectarlos”, señaló Spirit a través de un comunicado de prensa el sábado 23.
“Nos tomamos en serio la seguridad y la responsabilidad de transportar a todos nuestros huéspedes y estamos llevando a cabo una investigación interna. Pedimos disculpas a la familia por esta experiencia”, agregó la misma con vergüenza.
“Corrí dentro del avión hacia la azafata y le pregunté: ‘¿Dónde está mi nieto? ¿Te lo entregaron en Filadelfia?’ Ella dijo: ‘No, no tenía niños conmigo’”, manifestó María Ramos, la abuela del niño, a WINK-TV, en palabras recogidas por Telemundo 62.
Por suerte, el nieto de Ramos se comunicó con ella para informarle que había aterrizado, pero increíblemente a 160 millas de distancia. En la entrevista con WINK-TV, expresó su deseo de obtener explicaciones por parte de la aerolínea.
“Quiero que me llamen y me digan cómo terminó mi nieto en Orlando. ¿Cómo ocurrió eso? ¿Lo bajaron del avión? La azafata, después de que mamá le entregó la documentación, ¿lo dejó ir solo? ¿Se subió solo al avión equivocado?”, sentenció, muy enojada, la abuela del menor de edad que nunca en su vida olvidará esta particular experiencia.