La situación en la frontera entre Pakistán y Afganistán cada vez es más tensa. Luego de los constantes choques entre ambas naciones, desde Islamabad se anunció el cierre del cruce de Torkham durante nueve días debido a las condiciones de inseguridad que desde Kabul se han intensificado a partir de miembros talibanes.

A pesar de que la frontera se reabrió gracias a las garantías de que Pakistán no sería foco de atentados perpetrados por los talibanes, uniformados han comenzado a retener y arrestar ciudadanos afganos refugiados por las crecientes tensiones entre ambos territorios. A pesar de que los afganos cuentan con un permiso de residencia por parte de la ONU, el gobierno paquistaní insiste en seguir arrestando a cuantos más afganos se pueda, quitándoles dicho documento.

Los talibanes mantienen el control completo de Afganistán desde agosto de 2021. | Foto: Restringido

Solamente en Karachi, la ciudad más poblada de Pakistán, durante la semana pasada se encarcelaron a 250 afganos, reseñó Asia News. Por ende, el activista de derechos humanos, y abogado, Muniza Kabar declaró a medios locales que esos arrestos se han basado en los perfiles raciales de los refugiados, lo que indicaría que, a pesar de que no representen un peligro para la sociedad, los arrestos apelarían a la xenofobia.

Por todo lado, hace dos días más de 200 refugiados afganos fueron puestos bajo arresto en Islamabad, la capital paquistaní, quienes según medios locales, trabajaban en una plaza de mercado, además de contar con permisos para residir dentro de Pakistán como la “tarjeta de registro” un documento que la ONU le ha propiciado a los afganos desde el 2006 para poder vivir en la nación islámica sin inconvenientes.

Sin embargo, tras la llegada del régimen talibán al poder en agosto de 2021 con la retirada de las tropas estadounidenses, la validez de este documento se amplió por 2 años más. No obstante, los refugiados afganos se mostraron inconformes debido a la falta de información para poder extender este permiso. Asimismo, denunciaron el frecuente acoso que reciben por parte de las autoridades al momento de presentar solicitudes de asilo.

A pesar de que el gobierno talibán se ha comprometido a velar por la integridad de sus ciudadanos, la realidad es otra. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Un territorio sin rumbo establecido

De acuerdo con la ACNUR, departamento de la ONU que vela por la integridad de los refugiados, de los 3,7 millones de afganos establecidos en Pakistán, solo 1,3 millones están registrados. De hecho, esta entidad confirma que 1,6 millones de afganos han huido de su país luego de que fuera tomado por los talibanes, y de esos, al menos 600 mil han cruzado la frontera con Pakistán.

Los constantes altercados entre afganos y uniformados paquistaníes son cada vez más frecuentes en localidades cercanas a la frontera debido a algunos reportes que Islamabad ha realizado en donde se afirman que los talibanes han estado construyendo “estructuras ilegales”. Asimismo, la información gubernamental apela a que los radicales islámicos abrieron fuego cuando los cuerpos de seguridad paquistaníes los interceptaron.

Sin embargo, el régimen talibán no solo hace presencia en Afganistán, debido a que las fuerzas de seguridad han confirmado que también existen talibanes paquistaníes, quienes se asocian con los radicales afganos para infundir terror en ambas naciones, lo cual ha provocado la deportación de varios ciudadanos afganos sin antecedentes solamente por tener la ciudadanía de Afganistán.

La policía paquistaní ha despojado de documentos legales a los refugiados afganos, poniéndolos en peligro de ser deportados. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Por tal motivo, el Movimiento para la Protección de los Pastunes, envío recientemente una carta al Consejo de Derechos Humanos de la ONU para solicitar una intervención internacional “urgente”, debido a los fuertes choques entre los refugiados afganos y la policía paquistaní. Esta organización culpa tanto a los talibanes, como al Ejército de Pakistán por la degradación del territorio afgano.

A pesar de que el ministro de Relaciones Exteriores talibán, Amir Khan Muttaqi, prometió que Afganistán no sería sede de actos terroristas dirigidos hacia Pakistán, declaración a la que ya se había comprometido en el pasado, uno de los problemas principales de la crisis entre ambas naciones es la carente delimitación fronteriza por lo que los habitantes locales exigen la creación de un solo territorio, presionando aún más la agenda de las carteras de Exteriores de Kabul e Islamabad.