Sergio Alfieri, el médico que operó de una hernia al papa Francisco, aseguró este viernes que a partir de ahora el pontífice podrá llevar a cabo todos sus compromisos “con más fuerza que antes”. Advirtió que, aunque no tenga que estar “postrado en la cama”, sí tiene que ser “cuidadoso con sus esfuerzos”.
“Ahora podrá hacer todo con más fuerza que antes”, señaló el galeno en una entrevista con los medios del Vaticano.
El papa tiene previsto viajar a Lisboa del 2 al 6 de agosto para participar en la Jornada Mundial de la Juventud. Al mes siguiente tiene previsto un viaje a Mongolia y una misa multitudinaria en Marsella, en el sur de Francia, el 23 de septiembre.
Para el médico, si hace una “convalecencia cuidadosa” podrá realizar estos viajes en “mejores condiciones” que las que tenía cuando los “había planeado” cuando sufría fuertes dolores abdominales.
“Cuando los procesos de curación terminen, estará mejor. Y, por lo tanto, para mí él puede hacer absolutamente los viajes. Luego, con sus colaboradores durante este mes y medio tratará de equilibrar los compromisos entre los inaplazables y los más onerosos”, señaló Alfieri.
Indicó que si bien no tiene que estar “postrado en cama”, “sí debe ser cuidadoso con sus esfuerzos”. “Por lo menos un mes de convalecencia para aliviar un poco sus músculos abdominales, para que se curen bien y pueda reanudar todos sus compromisos”, insistió.
“Comparado con otros ancianos de 86 años, tiene un corazón perfecto, unos análisis de sangre que “envidiarían” muchos de 50 años”, destacó.
Aseguró, además, que el pontífice “tiene los órganos vitales, los que tenemos en cuenta en los pacientes cuando tenemos que valorar la criticidad o no, sanos. Su corazón está sano, nunca ha tenido problemas, sus riñones funcionan muy bien, sus pulmones funcionan bien”.
“Le hemos visto ocasionalmente tener ese silbido, pero es debido a la cirugía adicional que tuvo en su juventud —la extirpación de parte del lóbulo—, así que tiene menos pulmón que los demás, pero siempre ha tenido eso”, aseguró.
El médico cirujano, que también le operó de diverticulitis en 2021, dejó en claro que su única “preocupación” es que el papa tenga una buena convalecencia. “Que él y los que le rodean este primer mes limiten un poco sus compromisos, no en general, sino los que son pesados por lo que podría ser la tensión en la pared abdominal”, aseveró.
Según la oficina de prensa del Vaticano, el rezo ángelus del domingo y las audiencias de los próximos días están confirmados en su agenda. La oración dominical será la primera cita pública tras su hospitalización.
Sin embargo, no está previsto que celebre la audiencia general del miércoles 21 de junio que “se cancela para salvaguardar la recuperación postoperatoria del Santo Padre”, informó.
“Sigo vivo”, dijo el pontífice tras abandonar el Policlínico Gemelli
El papa Francisco salió del hospital en su silla de ruedas, abriéndose paso entre los periodistas y fieles que esperaban su salida desde primera hora de la mañana para saludarle. “Sigo vivo”, dijo el pontífice repitiendo las pocas palabras que suele pronunciar cuando se le pregunta por su salud.
Preguntado por un periodista sobre el naufragio de una embarcación cargada de migrantes frente a las costas de Grecia el miércoles 14 de junio, que causó la muerte de 80 personas y la desaparición de varios centenares más, respondió: “Tanto sufrimiento, tanto sufrimiento.”
Antes de regresar al Vaticano, Francisco visitó la basílica de Santa María la Mayor y, a continuación, hizo una visita a las monjas del Instituto María Santísima Bambina, reunidas en Capítulo General.
Al llegar al Vaticano en el coche Fiat 500 blanco que usa para sus desplazamientos, se detuvo un momento para saludar a los dos guardias suizos que custodiaban una de las entradas del Estado más pequeño del mundo.
El sumo pontífice, que fue operado de un pulmón cuando tenía 21 años, a menudo se ve obligado a aliviar su agenda por problemas de salud.
En los últimos meses, los rumores sobre una posible renuncia del papa fueron en aumento.
Esta fue su tercera hospitalización en menos de dos años. A finales de marzo ingresó en el hospital Gemelli por una infección respiratoria, que requirió tres días de tratamiento antibiótico. Según explicó, todavía le quedaban “secuelas” de la anestesia de 2021, que lo obligaron a aplazar una intervención quirúrgica en la rodilla.
En enero dejó entender que aún padecía problemas causados por divertículos, hernias o bolsas que se forman en las paredes del aparato digestivo.
*Con información de Europa Press y AFP