El Gobierno alemán impondrá nuevas restricciones a partir de la próxima semana para hacer frente al aumento de nuevos casos de coronavirus, como restringiendo el aforo en reuniones privadas o cerrando bares y clubes durante las fiestas de Año Nuevo, además de no permitir la entrada a grandes eventos deportivos.
Así lo anunció este martes el canciller alemán Olaf Scholz, quien lamentó no haber podido dar noticias más positivas antes de las vacaciones de Navidad. Las nuevas medidas, dijo, entrarán en vigor el 28 de diciembre.
“Esta pandemia nos preocupa a todos. Todos tenemos quejas y estamos cansados, pero eso no ayuda. Tenemos que unirnos de nuevo y, en muchos casos, mantener la distancia”, sostuvo Scholz, quien insistió en la vacunación como herramienta principal para combatir el virus.
Para hacer frente a esta quinta ola de la pandemia, la cual “no terminará tan pronto” como cabría esperar, el Gobierno alemán limitará las reuniones privadas a diez personas, sin incluir a los menores de hasta catorce años, independientemente de si han recibido o no la vacuna o han pasado la enfermedad.
Si bien la tasa de vacunación de Alemania se ha estancado en el 70,4 %, por detrás de otros países de su entorno, confía en que un “futuro próximo” el 80 % de la población haya recibido ya la pauta completa.
Alemania se ha marcado como objetivo administrar treinta millones más de dosis de refuerzo para finales de enero, en el momento en el que hasta ahora unos 27 millones de personas en el país han recibido ya la suya, recordó Scholz.
“El riesgo de que los adultos no vacunados se contagien y enfermen gravemente ha aumentado con la nueva variante del virus. Por eso mi llamamiento, ¡vacúnense por su propia seguridad, la de sus seres queridos y por la de todos nosotros!”, demandó el canciller alemán.
Las nuevas medidas fueron anunciadas tras la reunión de urgencia mantenida este martes entre el canciller Scholz y los primeros ministros de los dieciséis estados alemanes, después de que el nuevo comité de expertos sobre el coronavirus alertara de que la rápida propagación de la variante ómicron supondrá una “nueva dimensión” de la pandemia.
Las restricciones, que en esta ocasión afectarán también a quienes sí se han vacunado o pasado la enfermedad a diferencia de las que se impusieron en la pasada cuarta ola, podrán entrar en vigor antes del 28 de diciembre si los responsables de los estados así lo consideran.
Es el caso de Mecklemburgo-Pomerania, en el noreste de Alemania, cuyas autoridades han adelantado que pondrán en marcha medidas a partir del 24 de diciembre, debido principalmente a la saturación hospitalaria.
*Con información de Europa Press.