El futuro canciller alemán, Olaf Scholz, afirmó el martes ser favorable a la vacunación obligatoria contra la covid-19 para detener la nueva ola de la pandemia, informaron sus colaboradores.
Scholz “dice sentir que hay debate sobre la cuestión entre los diputados”, explicó su entorno, y “señaló que vería de buen grado esta norma”, durante una reunión entre la canciller saliente, Angela Merkel, y los dirigentes de 16 regiones alemanas, que podría concluir con un aumento de las restricciones sanitarias.
Los medios alemanes afirman que los principales impactados por las vuelta de las restricciones serían los bares y los clubes.
Alemania evitó hasta ahora la opción de imponer la vacunación, que sí aplica su vecino Austria, y que cuenta ahora con la aprobación de dos tercios de los alemanes, según un sondeo de los medios RTL y ntv.
Sin embargo, esta medida debería ser aprobada por el parlamento alemán.
Así las cosas, la obligación se votó recientemente para el personal de las residencias de jubilados y en los hospitales, así como a los soldados del Ejército. La medida será efectivo dentro de poco.
La situación sanitaria sigue siendo muy tensa, con una tasa de incidencia el martes del 452,2 por 100.000 habitantes.
Actualmente 68,5 % de los alemanes tiene la pauta completa de vacunación, cerca de 57 millones de personas.
La amenaza de la variante ómicron
Alemania, como otros países de Europa, han impuesto medidas restrictivas para contender la nueva variante de coronavirus, denominada como ómicron.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya clasificó esta variante como “preocupante”, encendiendo las alarmas en todo el mundo ante una eventual expansión de ómicron.
En un ambiente de incertidumbre a raíz de qué efectos podría tener ómicron, en términos de transmisibilidad y gravedad en los síntomas de covid-19, ha motivado a varios países a tomar medidas preventivas para protegerse de la llegada de esta variante. Si bien los científicos han coincidido en que se trata de una cepa con un número inesperado de mutaciones, los estudios siguen avanzando para obtener más información.
Una de las dudas ante la situación desatada por ómicron consiste en la probabilidad de que se convierta en la cepa dominante en el mundo. Si bien la información sigue siendo limitada, es precisamente el número de mutaciones presentes en su secuencia genética lo que ha preocupado a los científicos. A razón de estas mutaciones, la Organización Mundial de la Salud calificó de “muy alto” el riesgo general a nivel global en relación a la variante ómicron.
La última variante que generó un ambiente similar fue delta, detectada por primera vez en la India, y que rápidamente se convirtió en la dominante en todo el mundo. De acuerdo con la OMS, actualmente esta cepa representa 99,5 % de los casos de coronavirus a nivel mundial.
Sobre la probabilidad de que ómicron desplace a delta y se posicione como la cepa dominante en el mundo, John Moore, profesor de microbiología e inmunología en el Colegio Médico Weill Cornell de Nueva York (EE. UU.), en un artículo citado por Reuters, asegura que para determinarlo es necesario precisar qué diferencias existen en su transmisibilidad.
De acuerdo con los expertos citados por la agencia de noticias, el primer paso es analizar los datos públicos para establecer si los contagios de ómicron comienzan a superar a los de delta. Este proceso podría requerir de tres a seis semanas, en función de la rapidez con que la nueva variante se propague.
*Con información de AFP.