En medio de la creciente tensión que se vive en Europa por cuenta del recrudecimiento de la guerra que se libra en Ucrania, este martes, autoridades alemanas revelaron que decidieron apartar de sus funciones al hasta ahora encargado de la Agencia de Ciberseguridad de su país, Arne Schönbohm, luego de que se revelara que el citado funcionario tenía nexos con organismos de inteligencia de Rusia.
El anuncio de la destitución de Arne Schönbohm fue dado a conocer a través del portavoz del Ministerio del Interior, quien además advirtió que el retiro de las funciones del citado funcionario es de carácter inmediato.
Según refieren medios locales de Alemania, el ahora exfuncionario se encontraba bajo la lupa de autoridades de su país luego de que se hiciera manifiesta una denuncia en la que se le relacionaba con tener nexos y lazos con organizaciones que brindan asesoría en materia de ciberseguridad a servicios de inteligencias ligados al Kremlin.
En el anuncio de la destitución de Arne Schönbohm, el portavoz del ministerio del interior alemán precisó que en efecto dicho retiro del cargo responde a las “acusaciones bien conocidas y ampliamente comentadas por los medios”, advirtiendo además que estas terminaron por minar de manera definitiva la confianza que reposaba sobre el funcionario.
En ese sentido, el Ministerio del Interior también apuntó que dicha confianza es necesaria para el desempeño de las funciones, advirtiendo que esta es vital de cara a reflejar ‘neutralidad e imparcialidad’, dada la envergadura del cargo, y las responsabilidades que en este reposan como máxima autoridad de los cuerpos de ciberseguridad, más aún, enmarcada en el contexto bélico que actualmente se padece en Europa.
Si bien actualmente hacen curso por parte de las autoridades de Alemania, una serie de investigaciones orientadas a legitimar o deslegitimar las acusaciones contra Arne Schönbohm, el Ministerio del Interior afirmó que decidieron retirar del cargo al líder de la ciberseguridad, por razones que saltan a la vista, aunque sí afirmaron que la presunción de inocencia ha primado en el caso de los señalamientos que pesan contra el funcionario.
“En espera de la conclusión de esta investigación”, señaló el Ministerio del Interior, en declaraciones recogidas por medios internacionales a propósito del escándalo.
De acuerdo con lo advertido con medios internacionales, esta destitución ha llegado en momentos de gran sensibilidad para Europa, donde la mayoría de países se han manifestado en contra de las acciones que Rusia adelanta en territorio Ucraniano, siendo a la vez uno de los países que ha apoyado más decididamente la defensa por parte del Gobierno de Kiev.
Así, la sensibilidad de la denuncia también deriva del riesgo mismo de un eventual ataque de sabotaje por parte del Gobierno de Moscú, en un contexto que también ha estado marcado por la crisis energética que se derivó de la decisión de Europa de no seguir adquiriendo el gas que produce Rusia, una situación que también ha estado marcada por los recientes problemas en los gasoductos submarinos de Nord Stream 1 y 2, que han sufridos, desde el pasado 8 de octubre una serie de ‘sabotajes’ de gran escala.
Sobre el particular, si bien aún están abiertas las investigaciones para determinar de qué se trató lo ocurrido, muchas de las primeras hipótesis apuntan a la responsabilidad del Kremlin.
Precisamente, este lunes, imágenes difundidas por medios locales en Europa, han referido que el daño sufrido por el gasoducto Nordstream 1, durante el pasado mes de septiembre, afectó a al menos 50 metros del dicho canal.
Así, con la afectación denunciada, se estima que existirían al menos cuatro puntos de fuga, que a la vez ha causado afectaciones en el fondo marino.
Pese a las evidencias que han referido las autoridades europeas sobre el ‘sabotaje’ que sufrió el gasoducto, el Kremlin ha desestimado dichos resultados, advirtiendo que las pruebas están amañadas, al igual que la investigación, denunciando que la intención de quienes la adelantan, es incriminar a Rusia.
Con información de AFP.