China sigue creando terror en la región asiática y tomando decisiones que ponen en peligro la estabilidad, como la de separar con barreras flotantes una parte del mar que se comparte con Filipinas.
Ante esta acción arbitraria del gigante asiático, las autoridades de Filipinas informaron que la Guardia Costera de su país procedió a retirar dichas barreras instaladas por China en aguas en disputa del mar de China Meridional, cerca del banco de arena de Bajo de Masinloc.
Manila decidió poner en marcha esta medida y desmantelar la instalación china siguiendo las órdenes del presidente, Ferdinand Marcos Jr., quien insistió en retirar los 300 metros de barrera alegando que suponían un “peligro para la navegación”.
“En cumplimiento de las instrucciones del presidente, el presidente del Grupo de Trabajo Nacional para el mar de Filipinas Occidental (nombre por el que Manila se refiere al mar de China Meridional), Eduardo Año, ha pedido a la Guardia Costera de Filipinas que lleve a cabo una operación especial para eliminar la barrera flotante que obstruía la entrada sureste del Bajo de Masinloc”, dijo el portavoz de la Guardia Costera, Jay Tarriela, a través de sus redes sociales.
Las autoridades de Filipinas ya habían condenado la instalación de estas barreras y habían señalado que se trataba de una “violación de los derechos de pesca”. Desde ese momento también alertaron que tomarían “medidas oportunas para lograr la retirada de estas barreras y proteger los derechos de los pescadores”.
La portavoz del Departamento de Exteriores filipino, Teresita Daza, señaló que Filipinas “hará todo lo que esté a su alcance para proteger la soberanía del país y el sustento de los pescadores”.
El haber puesto esas barreras impidió a los pescadores filipinos entrar en el banco, donde abundan los peces y los pescadores pueden trabajar sin el peligro que supone hacerlo a mar abierto.
Filipinas es un aliado de Estados Unidos en la región asiática y hace poco los dos Gobiernos enviaron un mensaje contundente a China.
“Un ataque armado contra las Fuerzas Armadas, buques o aeronaves filipinas en el Pacífico, incluido el mar de China meridional, invocaría los compromisos de defensa mutua de Estados Unidos, en virtud del tratado de defensa mutua entre Estados Unidos y Filipinas de 1951″, se leyó en un comunicado conjunto.
¿Cuál es el problema entre Filipinas y China por este territorio?
En 2016, el Tribunal Permanente de Arbitraje falló a favor de Filipinas y rechazó las reivindicaciones de China sobre las aguas de la zona. Además, la corte determinó que China se comportó de forma “ilegal” y que carece de “derechos históricos” a los que agarrarse en este asunto.
Asimismo, el organismo concluyó que las patrullas llevadas a cabo en la zona por parte de China han amenazado la integridad de los buques pesqueros filipinos y alertó de los daños causados a los arrecifes de coral por las distintas obras realizadas durante los últimos años.
Manila ha argumentado en varias ocasiones que ninguna de las islas o arrecifes de las islas Spratly son lo suficientemente grandes como para garantizar una zona económica exclusiva (ZEE) de hasta 200 millas náuticas para China.
En cambio, en el caso del banco de arena alega que está incluida dentro de la ZEE correspondiente a la isla de Luzón y, por lo tanto, pertenece a Filipinas.
*Con información de Europa Press