Aunque en los últimos años las protestas y desencuentros del Gobierno ruso con sus ciudadanos fueron noticia, además de los temas sociales comunes, por la necesidad de reclutar cada vez más soldados para enfrentarse a los ucranianos en el frente de guerra, el problema ahora se estaría escalando a los grupos paramilitares que, como Wagner, estarían intentando levantarse en armas contra Vladimir Putin.

Pues bien, en medio de una entrevista con el medio británico The Times, el jefe de inteligencia militar ucraniano, Kyrylo Budanov, dio sus impresiones con respecto a la situación que estaba viviendo internamente su principal enemigo al momento, y explicó cuál era, para él, un peligro inminente que podría cambiar el curso de la guerra, y aunque se pensó en un inicio que podría ser un ataque a la central nuclear de Zaporiyia, un nuevo informe de la agencia en Kiev indica algo distinto.

En medio de la rebelión del grupo Wagner, de 46 regiones dentro del territorio ruso, 17 estaba a favor o apoyando a los paramilitares liderados por Yevgeni Prigozhin, | Foto: AP

En medio de su entrevista Budanov habló sobre el más reciente informe que logró obtener la inteligencia ucraniana del Ministerio del Interior de Rusia (MVD), en los que se exponía el apoyo de la ciudadanía que había recibido la rebelión del grupo Wagner en su intento por tomar Moscú, y justamente, estas declaraciones fueron las que el alto mando ucraniano indica que podría acrecentarse y convertirse en una inminente guerra civil dentro del país euroasiático.

“La situación indica exactamente de lo que ha estado hablando nuestro servicio: que la Federación Rusa está al borde de la guerra civil. Tiene que haber un pequeño ‘asunto’ interno, y el conflicto interno se intensificará”, afirmó Budanov en su entrevista con el medio británico, confirmando su argumentación.

Y agregó: “eso es lo que vemos ahora: que la sociedad rusa está dividida en dos pedazos”. Así entonces, para Budanov ahora es mucho más evidente y claro la posición de los rusos en medio de la problemática política y militar que se está sufriendo en el territorio, aunque no se mencionó si se debía a un malestar directo con el presidente o por la guerra en territorio ucraniano.

Entre tanto, se recalcó que el informe mencionado se había revelado que, en medio de la rebelión del grupo Wagner, de 46 regiones dentro del territorio ruso, 17 estaba a favor o apoyando a los paramilitares liderados por Yevgeni Prigozhin, mientras que 21 continuaban firmes al Gobierno nacional, y las 8 restantes estarían divididas.

Los combatientes del grupo mercenario privado de Wagner salen de la sede del Distrito Militar del Sur para regresar a la base, en la ciudad de Rostov-on-Don, Rusia, el 24 de junio de 2023. REUTERS/Stringer | Foto: Restringido

Yevgeni Prigozhin regresa a Rusia

El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, afirmó este jueves, 6 de julio, que el líder del Grupo Wagner, Yevgeni Prigozhin, ya no se encuentra en territorio bielorruso y que, de hecho, ha regresado a Rusia, país donde emprendió en junio una revuelta que puso en tela de juicio el liderazgo de Vladimir Putin.

Prigozhin viajó a Bielorrusia como parte de un pacto en el que Lukashenko ejerció de mediador. Las autoridades rusas se comprometieron entonces a no procesar al líder de la red de mercenarios por su rebelión, lo que se tradujo en un aparente exilio del que solo consta una declaración de Lukashenko en la que confirmaba la llegada.

Yevgeny Prigozhin, propietario del grupo militar privado Grupo Wagner, graba un mensaje en video desde Rostov. | Foto: PRIGOZHIN PRESS SERVICE

El líder del Grupo Wagner no ha reaparecido en público y se ha limitado a la difusión de grabaciones de voz, evitando las críticas que durante meses venía dirigiendo hacia la cúpula militar rusa, personificadas en el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, y vinculadas al desarrollo de la ofensiva militar en Ucrania.

Ahora, el mandatario bielorruso aseguró que Prigozhin se ha ido a San Petersburgo, matizando eso sí que no sabe dónde está “esta mañana”. “Quizás se fue a Moscú, o a otro lugar, pero no está en Bielorrusia”, manifestó Lukashenko, en un discurso a periodistas recogido por la agencia de noticias oficial BelTA.

Además, indicó que habló con Prigozhin el miércoles, pero “solo” del futuro del Grupo Wagner. Asimismo, evitó valorar cuál puede ser su futuro. No ha querido entrar en especulaciones, aunque ha descartado que Putin pueda ser tan “vengativo” o “maligno” como para promover su muerte de una u otra manera: “Esto no sucederá”.

Lukashenko también descartó que el motín lanzado por Prigozhin, cuyas tropas llegaron a avanzar hacia Moscú, hayan puesto de manifiesto una supuesta “debilidad” de Putin. Al contrario, considera que el mandatario ruso ha salido reforzado de esta crisis.

Sobre la presencia del Grupo Wagner en Bielorrusia, Lukashenko señaló que no supone “nada extraordinario” y, de hecho, confía en que los mercenarios puedan compartir su “amplia experiencia” de combate con las Fuerzas Armadas locales.

*Con información de Europa Press y AFP.