La Oficina Nacional de Emergencias de Chile (ONEMI) decretó el estado de alerta roja para la comuna de la Isla de Pascua por un incendio forestal que ha consumido tres hectáreas en el interior del Parque Nacional Rapa Nui.
La ONEMI advirtió de la “rápida propagación” de las llamas y afirmó que “se movilizarán todos los recursos necesarios y disponibles, en apoyo adicional a lo ya desplegado por CONAF, Bomberos y el Sistema Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SINAPRED)”, según información dada a conocer por el diario El Mercurio.
Poco antes de este anuncio la subsecretaría del Interior informó que hasta las 11:30 de la mañana del domingo 18 de diciembre había cinco incendios activos y 43 extinguidos.
Ya en el pasado mes de octubre un incendio en la isla había causado un daño “irreparable” al afectar unos 80 moáis, nombre con el que se identifica a las icónicas estatuas de piedra que se erigen por todo este territorio insular chileno en el océano Pacífico, según dijeron las autoridades locales.
La conflagración, que arrasó unas 100 hectáreas del Parque Nacional Rapa Nui y que fue extinguida, afectó al volcán Rano Raraku, alcanzando la cantera en la que la antigua civilización de indígenas Rapa Nui fabricaba sus moáis. En el lugar, hay unas 416 de estas esculturas en diversas fases de fabricación.
“Se logró extinguir (...) el incendio en la cantera del volcán Rano Raraku, causando, sin embargo, un daño irreparable al patrimonio cultural de la humanidad”, dijo este viernes el presidente Gabriel Boric, dando un balance sobre la situación.
Producto de la geografía, las maquinarias de los bomberos no pudieron acceder al lugar, que comenzó a arder el lunes pasado, explicó el alcalde de Isla de Pascua, Pedro Edmunds, en una rueda de prensa en Santiago de Chile, donde se encontraba por actividades oficiales. Las llamas, el humo y el agua ocasionaron en su momento que cerca de un centenar de los moáis que alberga la cantera se vieran afectados por el incendio, agregó el alcalde Edmunds.
Uno de ellos resultó completamente calcinado y “su daño es irreparable”, dijo Edmunds. “Se va a quedar ahí, tal cual, hasta que avaluemos el daño y recurriremos a la humanidad a ver qué solución aplicar”.
Las autoridades manejan la hipótesis de que el incendio tuvo un origen intencional. “Esta quema fue producida por los productores ganaderos por los pastizales. Todo indica aquello”, afirmó el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela.
Edmunds advirtió sobre la falta de guardaparques, debido a una reducción de presupuestos en medio de lo que calificó una situación de “abandono de la isla” por parte del Gobierno central, y atribuyó a ello el rápido avance de las llamas.
Ubicada unos 3.500 km al oeste del continente americano y en medio del océano Pacífico, la Isla de Pascua está habitada por unas 8.000 personas. El incendio sucedió dos meses después de que la isla se abriera de nuevo al turismo tras dos años y medio cerrada por la pandemia de coronavirus.
Con información de Europa Press.