Nicolás Maduro ha tenido muchas vías para aferrarse al poder. Pero hay una especialmente sofisticada: la cleptocracia. El régimen venezolano es conocido por el monumental robo que ha perpetrado por años a las inmensas arcas de dinero que deja el petróleo y otros negocios del Estado. En esa historia hay un colombiano que ha sido protagonista: Álex Saab.
El exprocurador de Venezuela, el jurista José Ignacio Hernández, asegura que Saab es “el master mind” de esa cleptocracia. Saab fue liberado en un espectacular operativo logrado por Nicolás Maduro ante el gobierno de Joe Biden. Se trató de uno de los mayores logros de ese gobierno en tiempos recientes. Saab llegó en un avión y fue recibido en grande, no solo por Maduro, sino también por su familia y su círculo más cercano.
Desde que pisó suelo venezolano, el dictador dejó claro que llegaría a tener un papel muy importante, ya de frente, en Venezuela. “Anuncio el nombramiento de Álex Saab Morán como nuevo presidente del Centro de Inversión Productiva de Venezuela. Que con su experiencia ayude a nuestro país a traer las inversiones y la fuerza económica del mundo... tiene la experiencia para atraer inversión. Álex, confío en ti plenamente”, le dijo mirándolo a los ojos, en medio de grandes ovaciones. Hace poco, Maduro lo ascendió a ministro de Industria de Venezuela.
En ambos cargos, Saab ha tenido un papel clave: lograr esquivar los bloqueos internacionales contra Venezuela. Saab, además, se convirtió en un símbolo de la lucha antiimperialista y es uno de los pocos triunfos que puede mostrar Maduro ante el Tío Sam.
En entrevista con SEMANA, el jurista Hernández habla del papel que ha tenido Saab en el régimen de Maduro y cómo su rol ha permitido al régimen aferrarse al poder. “El riguroso periodismo de investigación que ha adelantado Armando Info permite comprender el papel de Álex Saab en la cleptocracia venezolana. Su rol al frente de las políticas de industria y producción nacional es un claro mensaje de que la política económica de Maduro no se basa en la promoción de los mecanismos de mercado, sino en lo que se llama capitalismo clientelar”, sostiene Hernández.
Escuche a Roberto Deniz hablar de Álex Saab
El exprocurador explica que, para ello, “Maduro se vale de la Ley Anti Bloqueo, que le otorga poderes absolutos para manejar con opacidad las políticas económicas, en especial, en relación con activos”.
Agrega que un reciente ejemplo de “los riesgos de este modelo opaco es la situación de Monómeros. Con base en la Ley Anti Bloqueo, y según informó el Gobierno de Colombia, Saab diseñó un plan —totalmente opaco— para vender este activo, lo que llevó a la Superintendencia de Sociedades, el pasado 11 de diciembre, a someter a ese activo al máximo grado de supervisión. Sin transparencia, la política económica clientelar solo va a crear mayores obstáculos”.
Hernández explica por qué Maduro ha podido sostenerse tantos años en el poder, pese al enorme y cada vez más creciente rechazo del mundo democrático. “El régimen de Maduro califica como un autoritarismo duradero, de acuerdo con un reciente libro de Levitsky y Way. Ello no implica, por supuesto, estabilidad política”, dice.
“Por el contrario, creo que una razón que explica la permanencia de Maduro en el poder ha sido su capacidad de adaptación. Otra razón es su habilidad —contraria a la dignidad humana— de usar políticas de represión y de compensación para fortalecer sus alianzas. Las compensaciones se basan en el reparto clientelar de bienes y corrupción, dentro de lo que Bueno de Mesquita y Smith llaman el selectorado, o sea, las élites políticas y económicas que sostienen al régimen. Las licencias otorgadas por la Ofac a favor de empresas petroleras, al mejorar la capacidad financiera del gobierno de Maduro, han mejorado la capacidad de reparto clientelar de la renta petrolera, reforzando su permanencia en el poder”, agrega.
Hernández también asegura que la oposición ha jugado una parte importante. “Finalmente, la descoordinación e ineficiencia de la oposición política venezolana también ha contribuido a la estabilidad, aun cuando en menor medida. Esto último, por cierto, comenzó a cambiar luego de las primarias de 2023, que ha permitido restructurar a la oposición y elevar su coherencia, como lo demuestra el éxito de la estrategia frente a las presidenciales bajo el nuevo liderazgo de María Corina Machado”, sostiene.
Pero asegura que el mayor obstáculo es la falta de claridad frente a lo que viene, que genera mucha incertidumbre. “Creo que la primera razón que explica la permanencia del régimen es el miedo frente a una transición. Y esta es, para mí, el gran elemento faltante en Venezuela: no hay una estrategia creíble de justicia transicional, que no solo debe abarcar el ámbito político, sino, además, el económico. Se ha colocado mucha atención en como elevar el costo de permanencia de Maduro —las sanciones, por ejemplo— pero no en cómo crear condiciones institucionales que estimulen a miembros de las élites a desobedecer a Maduro, sin temor a represalias”.