Son pocos los aliados que tiene Vladimir Putin en el mundo y sobre todo en este momento cuando se encuentra en guerra con Ucrania.
Uno de sus más cercanos es el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, de quien se decía tenía grandes problemas de salud, ya que había cancelado anteriormente su asistencia a las celebraciones del Día de la Bandera.
Sin embargo, en las últimas horas se le pudo ver visitando el mando central de las Fuerzas de Defensa Aérea de su país.
“Muy a menudo discutimos asuntos de seguridad de nuestro estado, particularmente en el espacio aéreo. No tenemos una situación crítica ahora. Sin embargo, hay factores que generan preocupación”, dijo Lukashenko desde uno de los puestos del mando central, según declaraciones publicadas por la agencia de noticias BelTA.
El mandatario, que apareció ante las cámaras con un vendaje en la mano, se refirió también al incidente que involucró a varios helicópteros y aviones de combate militares rusos en la región de Briansk, a 200 kilómetros en la frontera con Ucrania, durante el fin de semana.
“Desde entonces, nuestras tropas han estado en alerta máxima. Es por esto que estoy interesado en la situación en todo el país. Y, por supuesto, en las distintas direcciones y perspectivas para el desarrollo de esta situación”, aseveró.
Lukashenko no ha sido visto en público desde que estuvo presente en los actos del Día de la Victoria celebrados el pasado 9 de mayo en Moscú para conmemorar la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
Durante el acto de Moscú parecía desorientado e incluso se retiró antes de la finalización de la ceremonia, según informaron distintos medios de comunicación. Desde entonces, la televisión pública no había emitido imágenes actuales del mandatario.
Bielorrusia guardará armas nucleares
El Gobierno de Bielorrusia justificó la necesidad de reforzar sus capacidades defensivas ante las “legítimas preocupaciones” que tiene en materia de seguridad, tachando de “exageradas” las reacciones internacionales al despliegue de armas nucleares.
Por esta razón, Lukashenko, dijo estar listo para albergar armas nucleares “estratégicas” de Rusia en su territorio, además de las armas “tácticas” que Moscú se dispone a enviar a este país aliado, confirmando lo dicho en días pasados por Vladimir Putin.
“Será necesario que (Vladimir) Putin y yo decidamos e introduzcamos aquí, si fuera necesario, armas estratégicas”, dijo en referencia a misiles de largo alcance. “No nos detendremos ante nada a la hora de defender nuestros países, nuestros Estados y nuestro pueblo”, declaró Lukashenko en un discurso sobre el estado de la nación.
Las armas nucleares denominadas “estratégicas” son más poderosas y de mayor alcance que las denominadas “tácticas”. Bielorrusia, único aliado de Rusia en Europa, está dirigido desde 1994 por Alexander Lukashenko y se encuentra a las puertas de la Unión Europea.
El Ministerio de Exteriores bielorruso afirmó en un comunicado que, “durante los últimos dos años y medio”, desde las controvertidas elecciones de agosto de 2020 que revalidaron el mandato de Alexander Lukashenko entre sospechas de fraude, el país ha sido víctima de una presión política y económica “sin precedentes” de la que culpa a los países de la Otan y la UE.
Con información de Europa Press