Un aluvión que el lunes arrasó un campo deportivo en la capital de Ecuador dejaba al menos 27 muertos y 53 heridos, informó el viernes el director de seguridad del municipio local, Guido Núñez.
“En los numéricos tenemos 27 muertos y 53 heridos”, expresó a la prensa el funcionario en el sitio del desastre, sobre la avenida La Gasca, en el noroccidente de Quito.
Agregó que “en el último reporte tenemos dos personas que continúan desaparecidas”.
Hasta el martes se habían reportado 24 fallecidos, 48 heridos y 12 desaparecidos.
Rescatistas mantienen las labores de búsqueda de víctimas en el área de la descampada cancha de barrio en la que se disputaba un campeonato de vóley ante público, que fue arrasada al ser lo primero que encontró la correntada al descender por una pronunciada quebrada.
Un embalse en la montaña que almacena el agua de lluvia, con capacidad para 4.500 m³, colapsó al recibir un caudal casi cuatro veces mayor, de acuerdo al alcalde Santiago Guarderas.
Hasta el jueves se cumplieron tres días de luto dispuesto por las autoridades locales en Quito, con 2,7 millones de habitantes y que el lunes soportó grandes daños a causa del aguacero más poderoso desde 2003.
Lodo, piedras, troncos y escombros se desplazaron a lo largo de 3 km por la empinada avenida La Gasca, la más golpeada por el torrente. Los trabajos de limpieza todavía se mantienen con maquinaria pesada.
Desde octubre, una dura época de lluvias afecta a 22 de las 24 provincias de Ecuador, dejando hasta el jueves 44 muertos, 77 heridos, 686 damnificados y 5.848 personas afectadas, según el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos.
Los daños alcanzaron carreteras, áreas agrícolas y viviendas, así como centros de salud y de educación.
“Tragedia de La Gasca”
La correntada, que se originó en las faldas del volcán Pichincha donde se asienta la capital, afectó principalmente al sector noroccidental de la ciudad.
“Solo se escuchó una explosión”, indicó a medios internacionales Mauro Piñas, quien relató que vio descender “ríos de lodo”.
El socorrista Cristian Rivera aseguró que varias de las víctimas sufrieron hipotermia durante el aluvión y que el “lodo llegaba hasta las rodillas”. Entre las estructuras dañadas también están un puesto policial y una subestación de energía eléctrica.
El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, quien el lunes viajó a China, expresó por Twitter sus condolencias a los familiares de los muertos “en la tragedia de La Gasca”.
“Seguimos trabajando en las labores de búsqueda y rescate, acciones de contención, atención psicológica y traslado de heridos a casas de salud”, añadió.
Según el alcalde de la capital ecuatoriana, Santiago Guarderas, Quito recibió más agua de la esperada. El lunes, una lluvia torrencial que se extendió por 17 horas, con un récord de 75 litros de agua por m², desprendió una ladera y formó el aluvión que a su pasó arrastró personas y también destruyó viviendas, vehículos y postes eléctricos.
Es “una cifra récord, que no la habíamos tenido desde el año 2003″, enfatizó. En el foco de la emergencia hay calles cerradas por el lodazal. El servicio eléctrico se ha ido restableciendo de manera progresiva.
Las afectaciones alcanzan a carreteras, áreas agrícolas y viviendas, así como centros de salud y de educación.
*Con información de la AFP.