El Kremlin ha advertido de que la autorización del gobierno de Estados Unidos a Ucrania para utilizar sobre suelo ruso misiles de largo alcance implica un aumento de las tensiones y supone, de confirmarse, un paso más en la “implicación directa” en el conflicto del país norteamericano.
Hasta ahora, Washington se había mostrado reacio a permitir que las fuerzas de Kiev disparasen los ATACMS sobre territorio ruso, pero este fin de semana varios medios estadounidenses, entre ellos The New York Times y The Washington Post, han informado sobre un cambio en dicha doctrina.
Si finalmente se confirma este permiso, sería “una situación cualitativamente nueva” en el actual conflicto, ha señalado ante los medios el principal portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según la agencia Interfax.
Peskov ha recuperado declaraciones del presidente Vladímir Putin para recordar que solo los países de la Otan pueden manejar los ATACMS.
Las autoridades rusas han dejado abierta la posibilidad de adoptar algún tipo de medida de represalia, en líneas similares con los avisos lanzados previamente. El ATACMS es un sistema de misiles supersónicos guiados que tiene un alcance máximo de unos 305 kilómetros.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, no confirmó el domingo las informaciones, pero sí se refirió a la noticia.
“Hoy, los medios de comunicación hablan mucho de que nos dan permiso para estas acciones, pero los ataques no se realizan con palabras. Estas cosas no se anuncian. Los misiles hablarán por sí mismos. Estoy seguro de que lo harán”, afirmó.
El funcionario, quien habló bajo condición de anonimato, confirmó las informaciones de The New York Times y The Washington Post sobre que esta decisión se adoptó en respuesta al despliegue de tropas norcoreanas para ayudar a Moscú en la guerra contra Ucrania.
La decisión se dio a conocer horas después de un bombardeo masivo ruso de las infraestructuras energéticas de Ucrania, que dejaron al menos 11 muertos y obligaron al país a anunciar cortes eléctricos la semana pasada.
El presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó el pasado mes de septiembre que Rusia se reserva la opción de utilizar armas nucleares en respuesta a un ataque contra Bielorrusia, su aliada en el conflicto con Ucrania.
“Nos reservamos el derecho de emplear armas nucleares en caso de agresión hacia Rusia o Bielorrusia”, declaró Putin durante una reunión del Consejo de Seguridad ruso en Moscú centrada en la estrategia de disuasión nuclear. Según el mandatario, esta postura ha sido coordinada previamente con Minsk.
El presidente también mencionó que se han planteado modificaciones a la doctrina nuclear rusa tras el trabajo realizado durante el último año por los ministerios de Defensa y Relaciones Exteriores, junto con otros departamentos gubernamentales, según Anadolu.
“Las condiciones para que Rusia recurra al uso de armas nucleares están claramente estipuladas. Consideraremos esta posibilidad si recibimos información verificable sobre el lanzamiento masivo de armas de ataque aéreo o espacial que crucen nuestra frontera estatal”, concluyó Putin.
*Con información de Europa Press.