En Suramérica cada año cierta cantidad de países llevan a cabo elecciones en las que se define su futuro. Los comicios presidenciales o legislativos determinan el rumbo de esos territorios y en 2025 tendrán lugar en cuatro naciones, en una región dividida entre gobiernos de izquierda y derecha.
En Argentina, Paraguay, Perú, Bolivia y Ecuador mandan presidentes de derecha, o al menos lejanos a movimientos más revolucionarios, mientras que Colombia, Chile, Brasil y Uruguay tienen mandatarios de izquierda, y en Venezuela hay una dictadura socialista. Así podrá cambiar el panorama.
Chile
Gabriel Boric cumplirá en marzo tres años al mando de Chile en lo que fue la llegada al poder de la izquierda más progresista para el país austral, con promesas de cambios económicos abruptos, reducción de la desigualdad y derechos para las minorías. Sin embargo, el mandatario más ideológicamente cercano a Gustavo Petro ha quedado en deuda en varios rubros.
Si bien consiguió logros históricos, como la reducción de las horas laborales o el aumento del salario mínimo, ha tenido sonados fracasos en materia de seguridad, y las reformas de pensiones y vivienda nunca llegaron a ningún lado. Además, aunque intentó ocultarlo, su Gobierno hizo campaña para una nueva Constitución más liberal, que terminó rechazada. Según la firma Cadem, la desaprobación llega hasta el 62 por ciento y la aprobación solo a los 32 puntos.
El mandatario sabe que viene un cambio de rumbo para el país, por eso dio un mensaje a su sucesor: “Independientemente de a quien le toque, entienda que estas políticas, en particular las vinculadas a la energía y a la transformación energética, son políticas de Estado, no de un solo Gobierno”, aseguró Boric en un discurso. La oposición parece lista para asumir el poder gracias a sus fuertes críticas al gobierno de izquierda, aunque han reconocido que el presidente condenó la dictadura en Venezuela tras el fraude electoral, cosa que no hicieron varios de sus homólogos.
La gran favorita a suceder a Boric es Evelyn Matthei, exalcaldesa de la comuna Providencia, ligada a la Unión Demócrata Independiente, un partido tradicional de derecha. En segundo lugar aparece José Antonio Kast, líder del Partido Republicano de Chile, un movimiento mucho más radical y conservador. Y la tercera opción es la carta de la izquierda con el regreso de Michelle Bachelet. Las elecciones serán el 23 de noviembre.
Ecuador
Las primeras elecciones importantes en la región en 2025 tendrán lugar en Ecuador el próximo 9 de febrero; el país vecino elegirá presidente, que estará en el cargo hasta 2029. Estos comicios son más que atípicos, pues ocurren en un contexto en el que el mandatario Daniel Noboa solo estuvo en el cargo dos años, pues tuvo que terminar el periodo de Guillermo Lasso, quien renunció a mitad de su periodo presidencial.
La realidad es que Noboa, quien aspira a la reelección, ha tenido un mandato más que variopinto. Se destacan éxitos en materia de seguridad, que llevaron a la disminución del 27 por ciento de los asesinatos, según cifras oficiales, además de otorgar becas y planes educativos a más de 100.000 personas. Pero ha debido lidiar con la crisis energética que ha tenido a buena parte del país a oscuras en varios momentos del año.
De cara al futuro, la candidatura de Noboa no parece tan fuerte, ya que para los comicios de febrero, dependiendo de la encuesta, aparece adelante o detrás de la candidata del correísmo, Luisa González. “Noboa ha demostrado una preocupante tendencia a violar derechos humanos fundamentales y destruir el Estado de derecho. El Gobierno viola todos los derechos fundamentales y establece un sistema reincidente y represivo que abusa del poder y permite la corrupción. Esto no es lo que el pueblo ecuatoriano merece”, dijo la candidata en su cuenta de X.
Bolivia
Pero si hay unas elecciones polarizadas son las de Bolivia, que se cumplirán el próximo 8 de agosto, y, al menos hasta ahora, hay pocas luces de lo que pueda pasar. Luis Arce se convirtió en presidente en 2020 tras ser elegido como sucesor de Evo Morales. Sin embargo, luego terminó rompiendo con el exmandatario de izquierda. De hecho, a Morales se le responsabiliza de la crisis, pues él y sus seguidores más radicales bloquean el país como respuesta a la inhabilidad del exmandatario para ser candidato.
“Estamos primeros en todas las encuestas. Esta es la razón por la que nos intentan robar la sigla, nos persiguen con una veintena de juicios, pretenden inhabilitarnos e intentan asesinarnos”, aseguró en X el expresidente, recordando que su candidatura fue suspendida por el Tribunal Constitucional, ya que ha sido mandatario del país por tres periodos consecutivos. Por ahora, no se sabe bien qué puede pasar. Se cree que, cuando sea totalmente oficial que Morales no estará en el tarjetón, las protestas se generalicen en Bolivia.
Morales antes de su inhabilitación aparecía primero o segundo, muy cerca de los otros candidatos. En este momento, ya las encuestadoras no lo incluyen en sus sondeos, que muestran un panorama distinto. Sin embargo, mientras las tensiones entre Luis Arce y el exmandatario indígena aumentan, el actual líder de los distintos estudios es Manfred Reyes Villa, alcalde de Cochabamba, un candidato independiente lejos del polémico partido Movimiento al Socialismo, que se disputan Arce y Morales.
Argentina
Aun cuando la nación gaucha no tiene elecciones presidenciales, ya que a Javier Milei todavía le quedan casi tres años de gobierno, realizará unos comicios que pueden ser igual de importantes para el futuro del mandatario, las elecciones legislativas, que tendrán lugar el 26 de octubre y renovarán 127 de las 157 bancas del Congreso argentino. De dichos resultados puede depender el destino del gobierno del libertario.
Con reformas pendientes para la desregulación de la economía, apertura comercial y más recortes fiscales, Milei necesita de los congresistas para que pasen sus propuestas, con las que promete seguir combatiendo la inflación y estabilizando los indicadores del país, pero por ahora no parece que será un gran desafío. “Milei arrasará en las urnas en 2025 y tendrá más fuerza política y se empezará a hablar, con toda plausibilidad, de ocho años de Milei”, aseguró en SEMANA el escritor Agustín Laje.
Según la firma CB Consultora, el partido de Milei, La Libertad Avanza, tiene una intención de voto del 39 por ciento, más de 20 puntos por delante del segundo lugar, el partido peronista y aliado del kirchnerismo, Juntos por la Patria. Los demás movimientos no llegan ni al 10 por ciento de intención de voto para los comicios del próximo año.