Cientos de bomberos trabajaron para sofocar varios incendios declarados en el sur de Francia, azuzados por la sequía, las altas temperaturas y los fuertes vientos.
Uno de los más graves fue el declarado cerca de Narbonne, en la frontera con España, donde unos 300 bomberos con decenas de vehículos, apoyo de aviones y helicópteros trabajaron para frenar un fuego que devastado al menos 120 hectáreas de pino, según la prefectura. Por el momento no hay personas afectadas, ni edificios afectados.
En la Costa Azul, este sábado, también ocurrió otro incendio cerca de Grasse, una localidad conocida por la industria del perfume. Unos 150 bomberos combatieron las llamas en un terreno de difícil acceso.
Durante la tarde se presenció la llegada de otros aviones para colaborar en las labores de extinción, informó el periódico local Nice-Matin, que destaca que los bomberos han conseguido evitar que el fuego afecte a varias viviendas y una fábrica de perfumes.
La prensa francesa confirmó que el primer incendio fue controlado, dejando alrededor de 120 hectáreas quemadas; pese a que las llamas fueron controladas por los bomberos, este se encuentra bajo observación para evitar su propagación.
Unos 193 bomberos locales trabajaron para contener las llamas, pero debido a la propagación del mismo a causa del viento tuvieron que solicitar la ayuda de 108 bomberos de otros departamentos.
El otro incendio localizado en el sur del país europeo, cubrió 10 hectáreas de vegetación en menos de tres horas. Según información publicada en Euro News, el origen de este incendio podría ser accidental debido a un corto generado en una vivienda cercana.
Violencia policial: el tema de moda en las elecciones legislativas de Francia
“La policía mata”. Este tuit del izquierdista Jean-Luc Mélenchon sacudió la campaña de las elecciones legislativas en Francia, donde la actuación policial está en entredicho por el caos en el Stade de France y la muerte de una mujer durante un control.
“Yo nunca he sido antipolicía. Estoy en contra del uso desproporcionado de la violencia”, tuiteó Mélenchon, junto a un extracto de una entrevista a la radio France Inter en la que reafirmó sus polémicas declaraciones.
Francia se encuentra bajo presión por las imágenes de caos registrado durante el partido Real Madrid-Liverpool, por la final de Liga Campeones, el pasado 28 de mayo en las afueras de París, que dieron la vuelta al mundo: hacinamientos de hinchas, robos y utilización de gas lacrimógeno.
El pasado fin de semana se registró lo que aparentemente sería un empleo desmedido de la fuerza, cuando policías dispararon contra un vehículo que rechazó detenerse para un control en París, puso de nuevo a las fuerzas de seguridad en primera plana y desató la polémica a nivel político.
Francia abrió dos investigaciones. El conductor, de 38 años, que resultó herido de gravedad, es sospechoso de “intento de homicidio de una persona con autoridad pública”, indicó la fiscalía. Según la policía, intentó embestir a los agentes antes de huir.
La otra investigación busca aclarar si los disparos efectuados contra el auto -y que le costaron la vida a una pasajera de 21 años, alcanzada en la cabeza- fueron en legítima defensa. El abogado de los tres policías implicados indicó que estos fueron puestos en libertad sin cargos.
Otro caso similar se registró en la madrugada del pasado martes en Argenteuil. Y el sábado por la noche, la policía usó gases lacrimógenos para dispersar a la muchedumbre que buscaba subir a autobuses de remplazo en una estación de tren de París, según el diario Le Parisien.
*Con información de Europa Press y AFP.