Un nuevo rascacielos de la firma con sede en Nueva York, Studio Sofield, ha terminado el tan esperado edificio catalogado como el más delgado del mundo y una joya para la arquitectura de la Gran Manzana.
Con 91 pisos, el rascacielos contiene 46 residencias de piso completo y dúplex, las imágenes pueden dar cuenta de pisos fabricados con roble macizo gris humo y en sus paredes algunas obras de artistas de la talla de Picasso y Matisse.
Con una magnífica vista al Central Park, el edificio abrió sus puertas al público para reconocer los vestíbulos opulentos decorados con piedra caliza, mármol, acero ennegrecido y terciopelo. Su altura completa los 435 metros, uno de los más altos del hemisferio, dejando al One World Trade Center y la Torre Central Park por encima con 541 y 472 metros respectivamente.
Fue tanta la expectativa que generó la construcción de este rascacielos que durante la pandemia del coronavirus, algunos de los primeros compradores, solamente con visitas virtuales, decidieron adquirir algunas propiedades.
Studio Sofield diseñó los interiores del edificio así como el Steinway Hall, que se encuentra adyacente de la torre, caracterizado por ser el complejo que alberga salas de conciertos, salas de exposición y departamentos de ventas de pianos.
El diseño ha sido aplaudido por expertos de decoración interior, los murales en bajorrelieves de hojas de oro y plata representan los hitos arquitectónicos de Nueva York y como tributo a la historia de los pianos se representaron elefantes deambulando por la ciudad.
Según el estudio, el diseño de la zona del bar se basó en el “legendario King Cole Bar” con un balcón ornamental que amplían las referencias materiales al edificio original.
Cada piso lo ocupa una residencia, un apartamento, y cada habitación principal está ubicada de una manera en la que se prioriza la vista hacia el norte y el sur de la ciudad, utilizando piedra macauba para el piso y puertas de casi tres metros de altura que separan la habitación de otras zonas sociales.
El rascacielos se encuentra en la 111 West con 57th Street en pleno centro de la ciudad, en una calle llena de torres similares que se le conocen como Billionaire´s Row y sus interiores incluyen una piscina de 25 metros adornada por ventanas de piso a techo y luces que la hacen ver reluciente.
Esta impresionante torre tiene una variedad de precios para los compradores que van desde los 7.75 hasta los 66 millones de dólares, este último precio corresponde a un Penthouse triple con una espectacular vista al Central Park, es la propiedad más costosa del edificio hasta la fecha.
Problemas económicos afectan compra de inmuebles en EE. UU.
A Estados Unidos le urge que la inflación empiece a ceder o de lo contrario tendrá que enfrentar nuevamente el fantasma de la recesión, que mantiene expectantes a los inversionistas y desacelera cada vez más la producción industrial y, por ende, su economía.
Solo en el segundo trimestre de 2022, los alquileres subieron en Nueva York el 20,4 %, según el portal inmobiliario StreetEasy.com. Y las filas de aspirantes son mucho más largas que hace unos meses.
A veces, no basta con llegar primero ni, incluso, ofrecer más dinero del que piden los propietarios -en muchos casos grandes empresas o fondos de inversión, en particular en Manhattan- para lograr firmar un contrato de arriendo.
Los requisitos para alquilar son draconianos: ganar un salario anual 40 veces superior al alquiler mensual, tener un historial de crédito impoluto, presentar las dos últimas declaraciones de impuestos y los estados de la cuenta bancaria.
*Con información de AFP.