La audiencia de lectura de cargos en contra de Álex Saab, señalado de ser testaferro de Nicolás Maduro, fue aplazada para el próximo 15 de noviembre de 2021 luego de que su abogado, Henry Bell, asegurara que no han podido reunirse a causa de la cuarentena obligatoria a la que fue sometido desde su llegada a Estados Unidos, extraditado de Cabo Verde.
La defensa de Saab asegura que esta semana esperan tener el primer contacto con el empresario y bajo ese argumento pidieron la prórroga de la audiencia que estaba programada para este lunes primero de noviembre en Miami.
A pesar de que el barranquillero tendrá dos semanas más para discutir la decisión con sus abogados, se da por hecho que se declarará inocente de los delitos de lavado de activos por más de 350 millones de dólares vinculados al Gobierno de Venezuela.
Durante la corta conferencia que se realizó a la misma hora que estaba pactada la audiencia, la defensa de Álex Saab también pidió al magistrado Edwin Torres que se regule el ingreso de la prensa, debido a que más de 300 personas se conectaron por Zoom, aparte de los fiscales y abogados del caso. La decisión estará sujeta a lo que determine la Fiscalía al tratarse de un juicio público.
Esposa de Álex Saab niega las acusaciones contra el empresario
Saab está acusado de siete cargos de lavado de dinero y uno más de conspiración para cometer ese delito. Pero, hasta el momento, la estrategia ha sido presentarse como un preso político.
Por el lado de Nicolás Maduro, su estrategia tiene nombre y apellido: Camila Fabri. La hermosa modelo italiana es la punta de lanza para vender la tesis de que Álex Saab no es el testaferro que guarda los secretos del régimen, sino un mártir del imperio. Fabri ha sido perfecta en este rol.
El amor sincero que se le nota por el barranquillero, su inteligencia y buena oratoria, las lágrimas que derrama cada vez que sale en público y el poderoso mensaje que manda en cada intervención han tenido eco. Hasta la semana pasada, de Fabri solo se sabía que era la modelo italiana casada con Saab.
La mujer ya se refirió a lo que hará su marido este lunes. “No hay nada que ‘cantar’, no hay mentira que puedan poner en su boca. La verdad prevalecerá, Álex regresará al país que con tanto amor sirve”, aseguró en Twitter.
Fabri ha sido enfática en decir siempre lo mismo: que su esposo está secuestrado en los Estados Unidos y que su suplicio no comenzó con su traslado en la Florida, sino con su arresto en Cabo Verde.
Hasta antes de la detención de Saab, de Camilla Fabri se había escuchado hablar muy poco. Se sabía de ella porque la justicia italiana la tenía en la mira y se había llevado titulares por ser propietaria de millonarios bienes confiscados en el Viejo Continente. La mujer, de hecho, despertaba sospechas porque había comenzado vendiendo ropa con un salario de 1.800 euros y terminado con un apartamento en la lujosísima Via Condotti de Roma. La justicia italiana decidió abrirle un proceso por blanqueo de capitales.
Allá tendrá que explicar cómo terminó con este inmueble de 5 millones de dólares, situado unos pisos más arriba de la prestigiosa tienda Bvlgari, lleno de valiosas obras de arte en su interior y 1,8 millones de euros en dinero.
Pero esa mujer de la que muchos se habían hecho una idea era muy diferente a la que apareció el domingo después de la captura de Saab, en una manifestación en la Plaza de Bolívar de Caracas.