Al menos 222 presos políticos habrían sido liberados en la mañana de hoy jueves, 9 de febrero, de las cárceles de Nicaragua. Según Tifani Roberts, periodista y corresponsal de Univisión, los presos fueron llevados a El Chipotle y de ahí al aeropuerto, donde un avión que despegó a las 06:30 a. m. (hora local), los estaría llevando en estos momentos hacia Estados Unidos.

La expresidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, se pronunció al respecto en su cuenta de Twitter: “La liberación de más de 200 presos de conciencia de las cárceles de #Nicaragua es una noticia que celebro en nombre de su dignidad y la tranquilidad de sus familiares. Pero no olvidemos que la lucha continúa por la restitución de la democracia y la libertad en ese país”.

Por su parte, Arturo McFields, exembajador de Nicaragua ante la OEA, indicó: “Confirmado. Una excelente noticia esta mañana. Conversé con mis fuentes en el Departamento de Estado y 222 presos políticos vienen a la ciudad de Washington”.

Según el exembajador, 222 presos políticos serían los liberados que estarían viajando a Washington gracias a “los esfuerzos de los que venían trabajando en esto”, también aseguró que viajaban quienes estuvieron en la disposición de viajar incluidos algunos sacerdotes. “Hay luz al final del túnel” terminó diciendo en el video el exmiembro diplomático de la OEA.

Javier Álvarez, un nicaragüense exiliado en Costa Rica, confirmó a la AFP que entre los liberados están su esposa y su hija, quienes tienen además nacionalidad francesa. Managua no ha dado una versión oficial por el momento.

Una fuente diplomática en Managua confirmó a la AFP la liberación de los presos, pero el gobierno de Ortega no ha dado una versión oficial por el momento. Más de 200 opositores fueron enviados a prisión en Nicaragua en el contexto de la represión que siguió a las protestas que estallaron en 2018 contra Ortega, en el poder desde 2007.

El escritor nicaragüense Sergio Ramírez, quien fue vicepresidente de Ortega en su primer mandato (1985-1990), y actualmente está exiliado en España, expresó su satisfacción por la liberación de los presos.

“Hoy es un gran día para la lucha por la libertad de Nicaragua al salir de las cárceles tantos prisioneros injustamente condenados o procesados, cárceles en las que nunca deberían haber estado. Van al destierro, pero van a la libertad”, tuiteó Ramírez.

El Gobierno de Nicaragua habría autorizado la liberación de los presos políticos, todos ellos considerados “traidores a la patria” por el régimen de Daniel Ortega, y su inmediata salida en un avión rumbo a Estados Unidos. Sobre todos ellos pesa, además, una inhabilitación “perpetua” para ocupar algún tipo de cargo electo en Nicaragua, donde en estos últimos años se ha recrudecido la represión de la disidencia.

En virtud de una resolución dictada el miércoles, las autoridades nicaragüenses han acordado la “deportación inmediata” a Estados Unidos de 222 personas, cuyas identidades no han trascendido, según un dictamen del Tribunal de Apelaciones de Managua leída por un portavoz judicial.

El año pasado, algunos presos fueron llevados a "audiencias judiciales" en la capital para que los jueces les informen cómo se encuentran sus recursos de apelación o casación. | Foto: AFP

Se les acusa de cometer actos contra la independencia y la soberanía de Nicaragua, de “incitar” a la violencia y el terrorismo, de perpetrar acciones de “desestabilización económica” o de perjudicar “los intereses supremos de la nación”, ha explicado el juez Octavio Rothschuh en una breve comparecencia transmitida por televisiones oficiales.

La directora de la ONG Amnistía Internacional para las Américas, Erika Guevara Rosas, ha celebrado estas liberaciones, aunque se trate de personas que “han sido enviadas al exilio”. “Fueron presas por defender los Derechos Humanos y levantar la voz contra un régimen despiadado”, ha subrayado en Twitter.

Crece tensión en Nicaragua: sacerdotes han solicitado salir del país para no poner en peligro su integridad

Los sacerdotes en Nicaragua habían asegurado que no se sienten seguros en el país, por lo que han solicitado emigrar del territorio. Desde el año pasado se ha presentado una difracción entre el Estado y la Iglesia, la cual ha llevado a más de una situación de tensión y carácter nacional.

Los funcionarios religiosos, bajo la ordenanza del Seminario de Managua, solicitaron el domingo 29 de enero marcharse de Nicaragua con destino a sus países de origen, debido a que afirman ser perseguidos y afectados por el autoritarismo de Ortega.

Obispo Rolando Álvarez luego de que la Policía allanara su residencia y lo pusiera en arresto domiciliario. | Foto: AFP

Aproximadamente desde septiembre, el mandatario empezó a arremeter nuevamente contra la institución religiosa debido a que afirmó que promovían el golpe de Estado por medio de los obispos. Además, indicó que la Iglesia es una tiranía. Es por ello que los cardenales y obispos consideran que se han vuelto objetivo del Estado, el cual los persigue y no permite que lleven a cabo su oficio.

Las persecuciones contra personas vinculadas a la Iglesia se han presentado desde 2018, con periodos más y menos intensos. El origen de estas fue la época en la que la religión protegió a los manifestantes que estaban en contra de Ortega.

Según las cifras, los ataques de la fuerza pública y seguidores del presidente dejaron 355 muertos, siendo admitidos casi en su mayoría por el Estado. Ahora se está presentando otro capítulo entre la difracción Estado con Iglesia, debido a que supuestamente desde los templos se están incentivando mensajes en contra del Gobierno.

Con información de AFP y Europa Press*