En medio de una audiencia en la provincia de Huesca, en España, un juez condenó a penas que suman 53 años de prisión a un guardia civil, tras comprobarse su responsabilidad en el abuso sexual a once niños menores de edad que estudiaban en el colegio de Barbastro.
Aseguran que el hombre de 43 años de edad, llamado Serafín E.C., además de ser guardia civil, daba clases extraescolares en ese colegio de la provincia de Huesca.
En medio del proceso judicial en contra del individuo, la justicia española tuvo como prueba unas imágenes de una cámara oculta que había sido instalada por una de las profesoras del colegio, quien tenía sospechas acerca de la conducta del guardia civil.
El individuo se encontraba detenido desde el 2019 tras ser denunciado desde el propio colegio donde laboraba, y por los padres de los menores de edad de entre los 6 y los 10 años a los que supuestamente él debía educar, proteger y cuidar.
De acuerdo con el medio español La Vanguardia, el tribunal descartó la existencia de delito respecto a otros menores que se vieron relacionados inicialmente con la denuncia.
La jurisprudencia del alto tribunal advirtió que “carecería de sentido resolver las dudas acerca de la legalidad de esa información obtenida por un particular, obligando a los agentes de policía a operar con una irreflexiva regla de exclusión que antepusiera la protección de los datos personales de narcotraficantes o la intimidad domiciliaria de un asesino frente a la investigación de un grave delito contra la vida o la salud pública”.
Cadena perpetua para satánicos que abusaron y mataron a un niño
A cadena perpetua condenaron en Argentina a los asesinos de un niño identificado como Mario Agustín ‘Marito’ Salto, quien tenía 11 años de edad.
Se trata de un hecho que conmocionó a la ciudad de Santiago del Estero en Argentina, teniendo en cuenta que, además de asesinar al pequeño, abusaron sexualmente de él y luego lo descuartizaron. Posteriormente, su cuerpo fue embolsado y arrojado a la basura.
Aseguran que todo ocurrió en medio de un ritual satánico ocurrido en 2016, cuya pena se conoció hasta ahora.
El menor fue raptado en momentos en que iba a pescar y, según las investigaciones de las autoridades de ese país, fue sacrificado en un rito satánico liderado por dos hombres conocidos como ‘El Brujo’ Jiménez y Rodolfo ‘Rody’ Sequeira, en un ofrecimiento a la ‘San Muerte’.
Aseguran que en el momento de la desaparición del niño, sus padres llevaron a cabo marchas en Buenos Aires para pedir el esclarecimiento del brutal crimen y que, incluso, El Brujo hasta participó de estas.
De tal modo, por ese brutal asesinato fueron condenados a cadena perpetua Miguel ‘El Brujo’ Jiménez y Rodolfo ‘Rody’ Sequeira.
Los magistrados condenaron a Jiménez, al considerarlo el autor intelectual del homicidio triplemente calificado por alevosía y en concurso premeditado de dos o más personas, abuso sexual con acceso carnal y privación ilegítima de la libertad, en concurso ideal de delitos.
Entre tanto, a ‘Rody’ Sequeira lo consideraron el autor material del delito de privación ilegítima de la libertad, abuso sexual con acceso carnal, homicidio triplemente calificado por alevosía y concurso premeditado de dos o más personas, en grado de partícipe primario.
Así mismo, el Tribunal condenó a once años de prisión a Ramón Rodríguez por considerarlo partícipe secundario de los delitos de homicidio triplemente calificado por alevosía y en concurso premeditado de dos o más personas, abuso sexual con acceso carnal y privación ilegítima de la libertad.
También les impuso la pena de tres años de prisión de cumplimiento efectivo a Eugenia Montes y Ramón Ocaranza, por encubrimiento agravado de los delitos de homicidio triplemente calificado por alevosía y en concurso premeditado de dos o más personas, abuso sexual con acceso carnal y privación ilegítima de la libertad, en perjuicio de la administración de Justicia.
Con la misma pena de tres años de prisión y el mismo delito fue condenado Pablo Ramírez, aunque le dieron por cumplida la condena por el tiempo que estuvo preso y quedó en libertad.
El Tribunal también condenó a tres años de prisión por encubrimiento agravado a Daniel Ocaranza, aunque no irá preso porque era menor al momento del hecho.