En Windsor, Reino Unido, un hombre quedó atónito cuando compró una bolsa de plátanos sin imaginarse que encontraría algo más que varias frutas. De hecho, el británico, identificado como Craig Harrison, afirmó haberse tropezado al retroceder, pues la sorpresa que se llevó no fue menor y pudo tener consecuencias más allá del susto.

Harrison, de 35 años de edad, ya había comido uno de los bananos cuando se percató de un bulto alojado entre ese racimo: se trataba de una araña de gran tamaño que le llevó a descubrir su temor a ese tipo de arácnidos. No obstante, el animal no estaba solo, ya que tenía adherido un saco que, según The Sun, albergaba hasta 200 crías.

El cliente se había alcanzado a comer uno de los plátanos (imagen de referencia). | Foto: Gettyimages

“Al principio, estaba en estado de shock. Tropecé hacia atrás y perdí el equilibrio”, contó al percatarse de la araña “aterradora y de aspecto malvado”. Después de aquella inolvidable experiencia, el individuo no descarta que haya desarrollado algún tipo de temor que, antes de ello, desconocía.

¿Qué pasó después?

Tras el repentino encuentro, Harrison se las arregló para hacer que el animal entrara en una caja y poderlo enviar a una entidad que controla las plagas de la cadena comercial. Allí confirmaron su procedencia de proveedores latinoamericanos, en concreto, República Dominicana.

The Sun informó que la Sociedad Zoológica de Londres la había reconocido como una araña cazadora, cautivada por ese tipo de frutas, por lo que logró camuflarse y así llegar hasta el otro lado del mundo. En promedio, esta especie puede alcanzar hasta seis pulgadas de ancho.

La araña probablemente procedía de República Dominicana (imagen de referencia). | Foto: Getty Images / Michael Nalley

El medio británico señaló que tras el episodio, ese hombre recibió disculpas de la tienda y una compensación económica de 100 libras esterlinas, unos 554.000 pesos colombianos. Sin embargo, ese valor es insuficiente para el inglés, quien apela al riesgo de que el arácnido se sintiera amenazado y lo atacara.

“Tenemos procesos robustos para evitar que las arañas viajen con nuestra fruta, pero en muy raras ocasiones pueden colarse”, fue lo respondido por el establecimiento. Según Vanguardia, esta especie no es venenosa, pero sus mordeduras sí podrían causar dolor. Por su lado, el diario Daily Mail dijo que una agresión desencadenaría malestares como vómitos.

Un caso similar le ocurrió a un taxista en el distrito londinense de Bromley cuando también, en una bolsa de plátanos, se encontró con un arácnido de dos pulgadas. Su primera reacción fue arrojar el paquete a la papelera, mientras se calmaba; posteriormente, recuperó la que luego fue identificada como una “errante brasileña venenosa”.

“Tuve que volver a enfocar mis ojos para poder ver sus grandes piernas huesudas y peludas (...). Abrí la bolsa, volteé los plátanos y todo lo que vi fue esta enorme masa oscura colgando”, dijo, según refirió Daily Mail.

Serpiente, entre las sábanas

Una serpiente bajo las sábanas, esa fue la compañía con la que se despertó una persona en el oeste australiano de Gold Coast en Queensland. Al lugar llegó un especialista en el manejo de ese tipo de animales, tras el susto que representó su presencia.

El hecho se presentó al oeste de Gold Coast en Queensland (imagen de referencia). | Foto: Getty Images / designbase

El caso fue compartido por el servicio de rescate Zachery’s Snake and Reptile Relocation con la anotación: “¡Revisa la cama con cuidado esta noche! ¡Esta serpiente marrón del este se reubicó de manera segura!”. En las imágenes se observa cómo parte del reptil aún seguía en la cama.

“No voy a dormir esta noche”, “Mi madre saldría corriendo de la casa y tal vez no regresaría hasta que sepa si es seguro”, “Dios mío, moriría solo de ver eso”, “Amo las serpientes, mi animal favorito, pero si viera una escena así me moriría”, fueron algunas de las reacciones.