Hombres armados que se presentaron como combatientes talibanes mataron a tiros a tres invitados a una boda en Afganistán por tocar música, indicó este sábado el gobierno talibán al condenar el incidente que también dejó heridos.

El portavoz del ejecutivo afgano, Zabihullah Mujahid, dijo que dos de los tres asaltantes fueron detenidos y aseguró que no actuaban en nombre del movimiento islamista y nacionalista, que regresó al poder a mediados de agosto.

“La pasada noche, en la boda de Haji Malang Jan en la localidad de Shamspur Mar Ghundi en Nangarhar, tres personas que se presentaron como talibanes entraron en la ceremonia y pidieron que detuvieran la música”, declaró el portavoz.

“Tras una serie de disparos, al menos tres personas murieron y varias resultaron heridas”, precisó.

“Dos sospechosos fueron detenidos por los talibanes y estos siguen buscando al tercero, que logró escaparse”, añadió el portavoz, que defendió que los asaltantes “utilizaron el nombre del emirato islámico para rendir cuentas personales y ahora deberán confrontarse al peso de la ley de la sharia”.

Qazi Mulá Adel, portavoz de la provincia de Nangarhar, confirmó el incidente sin dar más detalles.

“Los jóvenes pusieron música en una habitación separada, tres talibanes llegaron y les dispararon. Los dos heridos están en estado grave”, dijo un testigo.

Toda música profana fue prohibida por los talibanes durante su régimen anterior (1996-2001).

Aunque el nuevo Gobierno islamista aún no ha legislado al respecto, sigue considerando que escuchar música no religiosa es contrario a su visión de la ley islámica.

En una rueda de prensa anterior, el portavoz del Gobierno defendió que los talibanes se oponen a este tipo de actos.

“Si alguien decide matar a una persona, aunque se trate de uno de nuestros hombres, está cometiendo un crimen y lo llevaremos ante los tribunales”, aseguró.

Talibanes decapitaron a una jugadora de voleibol y publicaron las fotos en redes sociales

A comienzos de este mes de octubre varios talibanes decapitaron a Mahjabin Hakimi, la estrella en ascenso del club de voleibol del municipio de Kabul, según lo reveló su entrenador en medio de una entrevista con The Persian Independent.

Además, no satisfechos con haberle quitado la vida a la joven, aseguran que los talibanes publicaron fotos de su cabeza en las redes sociales. El entrenador vio la repugnante imagen en línea y decidió que debía hablar.

“Todas las jugadoras del equipo de voleibol y el resto de las mujeres atletas están en una mala situación, desesperadas y con miedo (...) Todo el mundo se ha visto obligado a huir y vivir en lugares desconocidos“, dijo en entrenador al medio citado anteriormente.

Sobre Mahjabin Hakimi se indicó que había jugado para el club de Kabul antes de que los talibanes tomaran el poder del gobierno y que era una de las dos mujeres que no habían logrado escapar de Afganistán.

De acuerdo con la estricta interpretación de la ley islámica, los talibanes no permiten que las mujeres practiquen deporte ni que participen en el trabajo o la educación y aquellos que desafían al grupo extremista corren el riesgo de ser torturados y asesinados.

Cabe destacar que el equipo nacional de voleibol femenino afgano ha solicitado a organizaciones extranjeras que las ayuden a salir del país, pero hasta ahora no han tenido éxito en su petición.

Los talibanes anunciaron el pasado 24 de septiembre que los castigos estrictos, como amputaciones de manos y ejecuciones, volverían a Afganistán.

Mullah Nooruddin Turabi, quien fue ministro de Justicia y supervisó la vigilancia religiosa durante el gobierno anterior de los talibanes, dijo que si bien los jueces juzgarán los casos, el Corán será la base de las leyes en Afganistán.

Turabi agregó en ese momento que el Gobierno estaba estudiando si ejecutaría los castigos públicamente y “desarrollaría una política” en el futuro.

Con información de la AFP.