Un cabo primero de la guardia de Granaderos de Tarqui, dentro del palacio de Carondelet, la casa presidencial en Ecuador, se habría suicidado usando un arma de fuego el pasado 13 de septiembre, en hechos que todavía están por esclarecerse.

Según las primeras informaciones, el cabo habría atentado contra su vida en las habitaciones de la Casa Militar de la Presidencia, en el centro histórico de Quito. Desde el Palacio de Gobierno lamentaron lo ocurrido a través de un pronunciamiento oficial desde el Palacio de Gobierno, mientras que el ministro de Defensa, Luis Lara, confirmó la muerte y aseguró que sería un suicidio.

“Parecen motivos personales, las investigaciones indicarán”, dijo Lara.

Medios ecuatorianos indicaron que el fallecido fue identificado como Jimmy Alfredo Guamán Ganazhapa, un cabo primero de la Fuerza Terrestre, al que hallaron con dos orificios en el cráneo, ocasionados por el pase de entrada y salida de un proyectil, posiblemente disparado con su arma de dotación, de acuerdo a declaraciones del ministro de Defensa.

Hasta el momento, las autoridades no han dado información sobre qué llevó al uniformado a tomar esta decisión, el medio Extra de Ecuador señala que versiones extraoficiales indican de que el soldado habría presentado cuadros de angustia por un problema personal. 

Las fuerzas militares montan guardia frente al Palacio Presidencial de Carondelet en Quito después de que el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, disolviera la legislatura. | Foto: AFP

Ante la noticia, los comentarios en redes sociales de algunos usuarios afirmaban de un supuesto encubrimiento de la verdadera causa de muerte, pero esto se confirmaría con la necropsia.

Los agentes policiales se dirigieron al cuarto donde ocurrió el suceso, que es el espacio asignado para los dormitorios del personal militar que labora en el sitio y brinda seguridad en el edificio, como parte de la protección del presidente de la República, Guillermo Lasso, en donde confirmaron el deceso del soldado.

Violencia en Ecuador: balacera en barrio popular deja cuatro fallecidos y seis heridos

Hombres armados asesinaron este jueves 7 de septiembre a cuatro personas y dejaron heridas de bala a seis, entre ellas dos niñas, en una populosa barriada del sur de Guayaquil, informó el coronel de policía Marcelo Castillo, jefe de la zona sur en esa ciudad portuaria, una de las más violentas de Ecuador.

En declaraciones a periodistas, el mando policial aseguró que uno de los muertos es un niño de 11 años, que era parte de un grupo de personas que estaban en la calle dando mantenimiento a varias motocicletas en los exteriores de una despensa.

Llegaron, detalló Castillo, “en actitud totalmente violenta, dos vehículos y cuatro motocicletas, haciendo usos de armas largas y cortas”.

En Ecuador, el narcotráfico está generando una gran ola de violencia en el país. | Foto: Foto Twitter

Precisó que abrieron fuego a quemarropa y que cuando escapaban hirieron de bala a dos niñas, de cinco y siete años, las que fueron estabilizadas en un hospital cercano. “Por la saña, por el grado de violencia... me imagino que obviamente eran retaliaciones contra una persona”, señaló.

Añadió que, mientras los policías perseguían a los atacantes, a los que “se les tenía plenamente visualizados… (vecinos) atravesaron troncos con clavos para que no podamos realizar la aprehensión de estos sicarios”. No obstante, uno de los presuntos atacantes fue detenido. El resto se fugó.

Ecuador registra una ola de violencia especialmente en las cárceles estatales y en las calles de ciudades como Durán, Esmeraldas y Guayaquil. Esta última pasó militarizada el año pasado durante 165 días bajo cuatro estados de excepción decretados por el presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, para hacer frente a los niveles de inseguridad.

Varios medios de comunicación informaron de dos explosiones en Esmeralda, provincia sobre la que rige un estado de excepción para hacer frente a una oleada de violencia. | Foto: La Radio del Sur/Twitter/@laradiodelsur

Ecuador cerró el 2022 con la tasa de homicidios más alta de su historia, 26 crímenes por cada 100.000 habitantes, según datos oficiales.

Las autoridades atribuyen la violencia a disputas e influencia de bandas del crimen organizado, apadrinadas por carteles de México y Colombia, que buscan el control de destinos y rutas para la exportación de drogas, especialmente cocaína.

Desde mayo del 2021, cuando Lasso llegó al poder, y agosto de este año, la policía ha decomisado 504 toneladas de narcóticos.

*Con información de AP