En medio de la tensión mundial derivada de los múltiples focos de confrontaciones o amenazas de confrontación que se viven en el mundo, este miércoles, 30 de noviembre de 2022, se produjo un incidente que despertó aun mayores niveles de preocupación en la región de Asia-Pacífico por cuenta de un ejercicio militar conjunto desarrollado por China y Rusia.
Según refieren medios internacionales, el hecho que subió la tensión en la zona consistió en un patrullaje aéreo conjunto de las fuerzas aéreas de las dos superpotencias, las cuales prendieron las alarmas de Corea del Sur.
Aunque el hecho no involucra directamente a Estados Unidos, su ocurrencia sí prende las alarmas también en ese país, en tanto ha venido trabajando en fortalecer su presencia en la región, y apoyar a sus socios en la zona como Corea del Sur y Japón, en un contexto que también está marcado por las rivalidades desprendidas de la guerra en Ucrania y lo que ello ha suscitado a nivel internacional, a lo que se suman las tensiones entre Washington y Pekín.
En medio de la alerta, el Gobierno de Corea del Sur, considerando una amenaza lo ocurrido, también dispuso el despliegue de sus aviones de combate, apuntando que sus radares detectaron la presencia de cerca de ocho aeronaves, pertenecientes a Rusia y China, las cuales sobrevolaron parte de su considerada zona de defensa aérea.
No obstante, medios internacionales también han destacado que es importante aclarar que pese a que estos aviones sobrevolaron la llamada zona de identificación de defensa aérea de Corea del Sur, en ningún momento violaron su espacio aéreo, hecho reconocido incluso por las mismas autoridades militares del gobierno de Seúl.
Mediante un comunicado emitido este miércoles por funcionarios del Ministerio de Defensa de Rusia, se aclaró que el sobrevuelo denunciado por Seúl consistió en una labor de patrullaje adelantada de manera conjunta con China, y que en este, un grupo de aeronaves tipo caza, sobrevolaron el mar de Japón y el de China oriental.
En ese mismo sentido, el comunicado del Ministerio de Defensa ruso, recogido por medios internacionales, aclara que el sobrevuelo que prendió las alarmas de Seúl se extendió por cerca de ocho horas, advirtiendo incluso que durante su itinerario, los caza rusos y chinos contaron con escolta de aviones ‘extranjeros’, o pertenecientes a terceros estados.
Ante las denuncias internacionales de Corea del Sur, el comunicado también precisa que en ningún momento se incurrió en violación del espacio aéreo de países diferentes a los que habían autorizado el ejercicio, advirtiendo que su desarrollo se enmarcó en acuerdos de cooperación entre los dos países, cuyo fin no se refiere a una alianza en pro de atacar un tercer estado.
Esta alianza es vista con recelo, en el concierto mundial por países como Estados Unidos, cuyo gobierno no está en el mejor momento de sus relaciones con el régimen de Moscú y con el Gobierno de Pekín.
La región de Asia Pacífico es considerada como un sector de suma importancia geoestratégica en el mundo, y de allí el interés de Estados Unidos y las otras superpotencias en hacer presencia en el territorio.
En la zona, uno de los temas que reviste mayor importancia se refiere a Taiwán, territorio propiedad de China, que goza con un régimen especial de autonomía, sobre el que China quiere comenzar a ejercer un mayor control, mientras que Estados Unidos aboga porque se mantenga el respeto de sus intereses particulares, los cuales han venido reinando desde tiempo atrás, y donde China no ejerce el control efectivo del territorio ni su población.
Este nuevo hecho se presenta pese a que semanas atrás, en el marco de la reunión del G20, los líderes de Estados Unidos y China, acordaron la necesidad de bajar la tensión en la zona, y trabajar por aminorar los escenarios de riesgo y diferencia entre los dos Estados.
Actualmente, China también se encuentra bajo la lupa de Occidente, pues, pese a no haber apoyado directamente a Rusia en la invasión a Ucrania, tampoco se ha pronunciado para rechazarla.
En medio de este contexto, Corea del Sur, o sus autoridades, explicaron, en un comunicado que, tras evidenciar la presencia de las aeronaves extranjeras, decidieron el despliegue de sus aeronaves, incluso desde antes que las aeronaves extranjeras entraran al llamado KADIZ, advirtiendo que ello se debió a una medida táctica ‘en caso de contingencia’.
A su turno, las autoridades japonesas también emitieron un comunicado en el que informaron haber detectado el sobrevuelo de aeronaves de China y Rusia a través del llamado estrecho de Tsushima, ubicado entre Japón y Corea del Sur.
Medios internacionales apuntaron que el pasado mes de septiembre, China y Rusia también desarrollaron acciones de cooperación en Defensa, refiriendo un envío de 2.000 soldados chinos, además de arsenal y vehículos militares a Rusia para el desarrollo de ejercicios conjuntos y labores de cooperación.
Si bien China no ha condenado la acción de Rusia en Ucrania, sí ha apuntado que es el resultado de provocaciones de Estados Unidos y la Otan.