La crisis en Níger se sigue recrudeciendo y esto ha sido evidente para algunos de los países que otrora se creían con incidencia y alta influencia sobre sus territorios como el caso de Francia, que, en virtud de lo anterior, poseía una amplia población de sus ciudadanos habitando en ese territorio africano.
No obstante, en medio de la crisis y las tensiones en aumento, sus gobiernos han dispuesto que es pertinente el retiro de dichos ciudadanos, por lo que estimó alzar un llamado no solo para que estos busquen salir del país, sino que también dispuso una aeronave para, a través de vuelos humanitarios, comenzar su evacuación.
Así, este martes, primero de agosto, el Gobierno francés dispuso el primer vuelo en un avión de pasajeros desde la ciudad de Niamey, convirtiéndose en el primer esfuerzo de un Estado europeo para salvaguardar la seguridad de sus habitantes tras el golpe de Estado con el que los militares de Níger dieron por terminado el Gobierno que la semana pasada derrocó a uno de los últimos líderes prooccidentales de esta región, quedando ahora bajo dominio de grupos afectos a la revolución yihadista.
De acuerdo con el informe de las autoridades francesas recogido por medios internacionales, en total fueron 262 personas las que salieron de Níger a bordo de un avión Airbus A330 dispuesto para tal por el Gobierno Macron.
Según destacan medios internacionales, en medio de las acciones de evacuación, y como parte del listado de 262 ciudadanos que abandonaron Níger, se contabilizó a un grupo de cerca de una docena de bebés.
Tras el despegue desde el aeropuerto de Niamey, se espera que el primer grupo de franceses evacuados llegue a París durante horas de la noche, más precisamente a las instalaciones del aeropuerto Roissy Charles de Gaulle, en la capital de Francia.
Esta información fue dada a conocer por la canciller de ese país, Catherine Colonna, quien a su vez confirmó que tras el despegue del primer vuelo, ya se han dispuesto nuevos vuelos en los que también se incluyen europeos de otras nacionalidades que desean salir de Níger.
De acuerdo con las autoridades francesas, este vuelo se desplegó tras la solicitud expresa de un nutrido grupo de nacionales franceses habitantes de Níger, quienes elevaron un llamado de auxilio a las autoridades.
Sobre dicho grupo, las autoridades estimaron que se trata de un grupo de cerca de 600 personas que se manifestaron deseosas de no seguir permaneciendo en suelo de Níger.
Según precisa la AFP, al grupo de 600 franceses se sumaría otro de cerca de 400 europeos de otras nacionalidades que también elevaron su llamado de SOS ante la difícil situación interna derivada de la inestabilidad política.
Tras el despegue del primero de los vuelos para el resto de franceses, las autoridades de ese país detallaron que se tiene previsto el despliegue de tres vuelos internacionales en un plazo no mayor a las 24 horas para lograr la oportuna salida de estos ciudadanos.
Al igual que Francia, desde Italia también se anunció la disposición de un vuelo especial que planea la migración de cerca de 90 italianos que se encuentran en Niamey, y que hacen parte de un total de cerca de 500 italianos desplegados en Níger, los cuales en su mayoría responden a oficios relacionados con las fuerzas militares locales.
Ante la no destinación de un vuelo especial por parte de Alemania, sus autoridades han instado a sus ciudadanos a aprovechar los vuelos dispuestos por otros países con el fin de que también puedan escapar de Níger ante la amenaza del recrudecimiento de las acciones bélicas.
Pese a la angustia expresada por los países europeos, también trascendió que en el caso de Estados Unidos, país que también cuenta con un nutrido grupo de nacionales habitando en Níger, se afirmó que no hay un plan de evacuación previsto.
En el caso de los franceses, si bien se dispuso la salida de un nutrido grupo, las autoridades de París han revelado que quienes no podrán escapar son aquellas personas que actualmente prestan su servicio como militares en ese país, a quienes se les ha ordenado quedarse en el territorio de Níger como parte del refuerzo a las fuerzas institucionales frente al estallido rebelde.
La caída del presidente de Níger, Mohamed Bazum, se presentó desde el pasado 26 de julio, en una acción que estuvo protagonizada por su propio cuerpo de defensa.
De acuerdo con la AFP, este es el tercer golpe de Estado que padecen las naciones africanas desde 2021, señalando la situación sucedida en los últimos meses en Malí y Burkina Faso, países también con una fuerte influencia gala.
Precisamente, en el caso de Francia, se estima que su fuerza en territorio de Níger alcanzó números importantes referidos a 5.400 soldados en la zona.
Sobre Francia, también se advirtió que en años anteriores redujo su pie de fuerza en países como Malí y Burkina Faso, retirando gran parte de su tropa hacia Burkina Faso y Níger.
Sobre los soldados extranjeros en el campo de batalla, la AFP también destaca la participación de fuerzas estadounidenses que se han sumado en medio de la diana antiyihadista.
Según detalla la AFP, la amenaza que se estableció en contra de su embajada en días pasados sirvió como determinante para la evacuación de los residentes franceses, pero estableció la necesidad de la permanencia del Ejército.
Desde la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), también se conocen acciones contra el gobierno de facto en Níger, advirtiendo que si pasa una semana bajo el control de los rebeldes, estará dispuesto a intervenir empleando la fuerza.
Si bien la junta militar que tomó el poder ha afirmado que están dispuestos a usar la fuerza, Francia repelió a las amenazas señalando que el plazo que dan para evitar un ataque es de aquí al domingo, señalando que la ciudad de Bazum debe estar restablecida antes de la fecha.
Francia negó injerencia en los asuntos internos de Níger, pese a que hace presencia en el lugar, y a que el ejército rival le ha tildado de intervenir en un conflicto que puede desencadenar en guerra.
*Con información de la AFP.