La creciente del río Táchira llevó a las autoridades de ese país abrir el paso fronterizo a través del puente Simón Bolívar, según confirmaron fuentes periodísticas desde el vecino país.
El hecho quedó registrado en varios videos que compartieron taxistas de la zona en los que se puede ver el tránsito de vehículos por el lugar, luego de que la Guardia Nacional Bolivariana permitiera el paso tras la crecida del afluente debido al fuerte invierno que afecta la zona.
Como se recuerda, tras el anuncio de Venezuela de reabrir el paso fronterizo este procedimiento pueden hacerlo estudiantes y personas que requieran atención médica de urgencias.
Debido a esas restricciones, el resto de las personas cruzan la línea de frontera con Colombia a través de trochas, sobre las que las autoridades del vecino país adelantan una estrecha vigilancia.
Sin embargo, ante la emergencia, la Guardia Nacional Bolivariana determinó abrir parcialmente el paso. Se conoció que volverá a cerrarlo una vez se supere la situación por la creciente del río.
“Paso libre en el Puente Simón Bolívar. Ante la crecida del río Táchira, la Guardia Nacional dio paso libre a los venezolanos en el Puente Binacional Simón Bolívar, que divide la frontera entre Colombia y Venezuela y que permanecía cerrado desde 2020″, informó en Twitter, En Frontera.
Agregó que “la medida permitió que centenares de personas lograran pasar desde San Antonio del #Táchira a #Cúcuta para hacer compras y diligencias. Estas personas normalmente pasarían por trochas, pero hoy quedaron inhabilitadas ante la crecida del río”.
Como se recuerda, hace una semana Venezuela anunció reapertura de su frontera terrestre con Colombia, más de dos años después de que fueran cerradas en 2019 en medio de una crisis política y diplomática.
El anuncio de la vicepresidenta Delcy Rodríguez, en un mensaje en la televisión estatal, fue antecedido por la decisión del Gobierno venezolano de retirar los contenedores que bloqueaban la circulación por el principal cruce fronterizo entre Venezuela y Colombia, el puente Simón Bolívar-Francisco de Paula Santander.
El gobierno ordenó el bloqueo de los pasos binacionales a principios de febrero de 2019, en el pulso por el ingreso de alimentos e insumos médicos gestionados por el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por más de 50 países, entre ellos Estados Unidos y Colombia.
Los obstáculos y una fuerte presencia militar impidieron el ingreso de los cargamentos desde Cúcuta el 23 de febrero, lo que generó violentos disturbios en el lado venezolano.
Maduro, que rompió relaciones diplomáticas con Bogotá por su reconocimiento a Guaidó, ordenó entonces el cierre de la frontera aduciendo que las donaciones eran un pretexto para una “invasión” de Estados Unidos.
Un montacargas arrastraba los obstáculos metálicos pintados con colores patrios, atravesado en el Puente Internacional Simón Bolívar, que comunica a la ciudad venezolana de San Antonio del Táchira con Cúcuta, en Colombia, dejando una estela de tierra y marcas en el asfalto, como se pudo constatar en ese momento por un periodista de la AFP.
En la víspera, el domingo en la noche, militares venezolanos quitaron las vallas metálicas que obstaculizaban el paso hacia el puente Simón Bolívar.
“Pasando página”, indicó la vicepresidenta desde Caracas. “Aquí nos encontramos hoy dando apertura comercial binacional para que a través del puente Francisco de Paula Santander empiecen a ingresar gandolas [camiones] con productos de Venezuela a Colombia, de Colombia a Venezuela”, añadió.
Colombia ya había decidido en junio de 2021 abrir de manera unilateral sus fronteras fluviales y terrestres con Venezuela, una medida que entonces fue calificada de “intempestiva” por el gobierno de Maduro, que pedía una “reapertura controlada”.
Por orden de Maduro, la frontera con Colombia de más de 2.000 km, que incluye igualmente a los estados Zulia, Apure y Amazonas, estuvo cerrada durante varios meses entre 2015 y 2016.
El paso se fue reanudando entonces poco a poco, en principio, con permisos especiales por razones laborales o médicas.
Aquella medida, en reacción a un ataque armado contra una patrulla militar venezolana, tuvo fuerte impacto y apenas el 20 % de la industria y el comercio sobrevivió en Ureña y San Antonio, denunciaron entonces gremios regionales.
El comercio bilateral rozaba los 7.500 millones de dólares en 2009 y una década después era 15 veces menor, según estimaciones privadas.
Por la frontera con Colombia, desde 2015, emigraron igualmente millones de venezolanos huyendo de la peor crisis de la historia moderna de Venezuela. Según la Acnur, 5,7 millones abandonaron el país y la mayoría se quedó en Colombia,
Con información de la AFP.