La Policía española informó sobre un insólito hecho ocurrido en una playa de Sanlúcar de Barrameda en Cádiz, Andalucía, donde encalló una lancha con un cargamento de droga que estaba siendo perseguida por agentes de la Agencia Tributaria de Aduanas, la Guardia Civil y la Policía Nacional.
Al parecer, mientras las autoridades se encontraban en un operativo antidrogas, persiguiendo el bote con un cargamento de narcóticos, lograron que los ocupantes de la lancha encallaran en la playa, donde se esperaba que las autoridades continuaran con la incautación de la droga.
Sin embargo, justamente cuando los bañistas se dieron cuenta de lo sucedido, comenzaron a robarse los narcóticos. Ante la situación, el helicóptero de Aduanas sobrevoló el lugar y pidió a los civiles que se retiraran, esto mientras llegaban los refuerzos en tierra, pero la situación no mermó rápidamente, sino que se convirtió en disturbios.
“Sanlúcar de Barrameda (#Cádiz) es nuevamente noticia esta semana por el narcotráfico. Helicóptero de Aduanas ( @aduanassva) tras una persecución logra que encalle una narcolancha cargada presumiblemente de hachís. Y, ¿qué hace la gente?”, escribió en un trino el Sindicato Mayoritario de la Policía.
Y agregaron: “Se arremolinan e intentan robar el cargamento. Tanto en el #CampoDeGibraltar como en el resto de la provincia de #Cádiz hay un grave problema con el narcotráfico y no sirve de nada intentar ocultarlo. Nuestro reconocimiento a los compañeros que allí trabajan”, haciendo referencia a lo insólito del caso.
Según medios locales, la aeronave estuvo custodiando durante toda la noche la narcolancha, con el objetivo de que ninguna otra persona se llevara los narcóticos. Entre tanto, se estima que era un cargamento de hachís.
El hecho fue grabado por los bañistas y difundido a través de las redes sociales, lo que también habría causado que más personas llegaran al lugar a intentar obtener algo del cargamento.
Desarticulan banda que explotaba sexualmente a mujeres colombianas en España
La Policía de España dio a conocer que logró acabar con una red de explotación de mujeres que operaba en la ciudad de Tarragona. Las víctimas de esta peligrosa banda eran de nacionalidad colombiana, según información de las autoridades españolas.
El grupo era conformado por dos hombres y una mujer, conocida con el alias de Mami, quien era la encargada de reclutar a las mujeres para fines sexuales. Uno de los hombres era el cabecilla, quien manejaba el dinero y las casas donde ejercían los actos sexuales, mientras el otro era el que vigilaba a las mujeres.
La banda logró ser desarticulada gracias a una llamada a la Policía el pasado 12 de julio denunciando esta práctica ilegal. Desde ese instante se iniciaron los diferentes operativos de investigación que acabaron con la detención de las tres personas mencionadas. Una de las víctimas colombianas narró a las autoridades que eran obligadas a trabajar 24 horas al día y cuando podían descansar, solo tenían dos horas para hacerlo.
En otro caso similar, en Madrid, agentes de la Policía Nacional detuvieron a una pareja de origen rumano por el mismo delito de explotación sexual. Se presume que la pareja obligaba a la mujer liberada a entregar 500 euros diarios sin poder abandonar la prostitución hasta que los consiguiera.