El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, criticó este viernes a la bancada republicana en el Congreso debido a que su insistencia en impedir la aprobación presupuestaria podría forzar la suspensión de actividades del Gobierno a la medianoche del sábado al domingo, lo que supone un peligro para el desempeño de los militares norteamericanos.

El Senado, dirigido por los demócratas, ha ofrecido un plan de financiación temporal rechazado por la Cámara Baja del Congreso, bajo control republicano, que solicita en su lugar una propuesta a largo plazo. Esta disputa ha revelado nuevas tensiones internas en el seno del partido conservador, ya que hay representantes moderados que sí apuestan por la aprobación del plan demócrata.

El líder de los republicanos en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, espera convencer a los demócratas de que incluyan en su plan ciertas provisiones de financiación sobre seguridad fronteriza que puedan convencer a los elementos más extremistas de su partido a aceptar la propuesta rival.

El presidente de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Kevin McCarthy. | Foto: Reuters / Elizabeth Frantz

“No se puede jugar a hacer política mientras nuestras tropas están en combate”, ha lamentado Biden durante la ceremonia de la salida del cargo del, hasta hoy, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, el general Mark Milley.

Joe Biden, presidente de Estados Unidos. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved

Biden expresa preocupación por el peligro del “extremista” Trump para la democracia

El mandatario demócrata dijo en un discurso en el estado de Arizona que Trump estaba impulsado por un sentimiento de “venganza y revanchismo” y que, junto a sus aliados de extrema derecha, ataca a la prensa libre y al estado de derecho.

Biden se ha cuidado hasta ahora de comentar las múltiples acusaciones penales contra Trump, incluida su participación en iniciativas para revertir su derrota electoral de 2020. Pero no se contuvo acerca del peligro que, según él, correría el país con un segundo mandato de Trump.

“Las democracias no mueren solo a punta de fusil”, dijo. “Pueden morir cuando la gente guarda silencio, cuando no se levanta o no condena las amenazas a la propia democracia”. “Algo peligroso está sucediendo en Estados Unidos”, agregó, y sostuvo que el partido Republicano está siendo “impulsado e intimidado” por el sector más afín a Trump.

“No ocultan sus ataques. Los promueven abiertamente. Atacan a la prensa libre como enemiga del pueblo, atacan el estado de derecho y promueven la supresión de votantes”. Biden criticó a los republicanos por no reaccionar después de que Trump acusara al jefe del Estado Mayor Conjunto de traición, y arremetió contra los partidarios del expresidente por buscar el cierre del gobierno esta semana.

Ataque directo

Sus palabras más duras las reservó, sin embargo, para el propio Trump. “Trump dice que la constitución le dio ‘el derecho a hacer lo que quiera’”, dijo, refiriéndose a declaraciones del magnate republicano sobre sus atribuciones en el cargo. “Nunca he escuchado a un presidente decir eso ni en broma”, agregó.

Este contundente discurso de Joe Biden se llevó a cabo en un momento crítico, justo después de que los congresistas republicanos iniciaran el jueves una serie de audiencias de investigación de juicio político contra el presidente. Estas audiencias se basan en acusaciones no probadas de que Biden mintió sobre los negocios de su hijo Hunter, lo que ha generado una fuerte polarización en la esfera política estadounidense.

El presidente buscó durante su intervención ganarse la simpatía de otros miembros del partido Republicano al mencionar el legado de su oponente político y amigo cercano, John McCain.

McCain, quien fuera senador por Arizona y un héroe de la guerra de Vietnam, se convirtió en el contrincante de Biden en las elecciones presidenciales de 2008, aunque finalmente fue derrotado por el demócrata Barack Obama, quien contó con Biden como su vicepresidente. A pesar de las diferencias políticas que pudieron existir entre McCain y Biden, ambos líderes decidieron dejar de lado esas divergencias cuando Trump asumió la presidencia.

Con información de Europa Press