El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó este lunes tener “esperanza” de que se alcance un acuerdo para un cese el fuego en la guerra entre Israel y el grupo terrorista Hamás en Gaza a partir de la próxima semana.
“Mi asesor en seguridad nacional me dice que estamos cerca, estamos cerca, no estamos ahí todavía. Mi esperanza es que tengamos un alto el fuego para el próximo lunes”, dijo Biden a periodistas durante un viaje a Nueva York.
Los países intermediarios, Catar, Egipto y Estados Unidos, intentan negociar un compromiso con Israel y Hamás con vistas a una tregua.
Según una fuente del movimiento islamista, las conversaciones se refieren a la primera fase de un plan elaborado en enero por los mediadores, que prevé una tregua de seis semanas combinada con la liberación de los rehenes en poder de Hamás y de prisioneros palestinos en Israel.
También la entrada a Gaza de una cantidad considerable de ayuda humanitaria.
Pero Israel exige la liberación de todos los rehenes durante esta pausa y ha advertido de que una tregua no significará el fin de la guerra.
Hamás, por su parte, pide un alto el fuego total, la retirada de las tropas israelíes de la Franja de Gaza y el levantamiento del bloqueo impuesto por Israel desde 2007.
La guerra estalló el 7 de octubre, cuando comandos de Hamás infiltrados desde Gaza lanzaron un ataque sin precedentes contra el sur de Israel, que causó la muerte de al menos 1.160 personas, la mayoría civiles, según un recuento de la AFP basado en datos israelíes.
Durante el ataque, unas 250 personas fueron secuestradas y trasladadas a Gaza. Según Israel, 130 rehenes siguen retenidos, 31 de los cuales se cree que han muerto.
La represalia israelí se ha cobrado 29.782 vidas, en gran parte civiles, según el Ministerio de Salud del territorio palestino, controlado por Hamás, que contabilizó 90 muertos en 24 horas este lunes.
Israel comenzó ofensiva contra el Líbano, tras ataque contra un dron perpetrado por Hezbolá
El Ejército de Israel ha ejecutado este lunes bombardeos “en profundidad” en Líbano tras el derribo de un dron militar por parte del partido-milicia chií Hezbolá, en el marco de los enfrentamientos de las últimas semanas en la frontera, al hilo de los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) contra territorio israelí.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) están atacando objetivos de Hezbolá en zonas profundas de Líbano”, señaló el Ejército a través de un breve comunicado, sin que, por el momento, haya más detalles sobre los puntos atacados.
Según las informaciones recogidas por el diario libanés L’Orient-Le Jour, al menos dos personas han resultado heridas en un bombardeo en los alrededores de la localidad de Adus, en el valle de la Bekaa, en el que sería el primer ataque contra esta zona desde el inicio de los enfrentamientos.
Fuentes de seguridad libanesas citadas por este medio han señalado que los ataques han alcanzado depósitos de alimentos, en los alrededores de la ciudad de Baalbek. Hezbolá no se ha pronunciado por ahora sobre estos ataques.
Apenas unas horas antes, el partido-milicia chií había confirmado el derribo de “un gran dron” israelí de tipo Hermes 450 utilizando un misil tierra-aire, cuando el aparato sobrevolaba Iqlim al Tefá, en la región de Nabatiye, según recogió la cadena de televisión Al Manar, vinculada al grupo.
Con información de AFP