El senador republicano por el estado de Florida en Estados Unidos, Marco Rubio, dijo para el medio independiente Ciber Cuba que el nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, debe elegir si continúa con la política que dejó Donald Trump u “otorgarle al régimen de La Habana legitimidad internacional a sus expensas”.

Según Rubio, Cuba es un país insular bajo un régimen comunista y la dictadura aterroriza a su propia gente; no obstante, el republicano se preguntó cómo las administraciones de Estados Unidos pueden responder a ese régimen.

Durante el mandato de Trump se impulsaron políticas que apoyaron al pueblo cubano al responsabilizar al régimen de Castro y Díaz-Canel por décadas de represión, situación que durante el mandato de Obama fue “débil”, según el republicano.

De hecho, durante las primeras intervenciones del nuevo mandatario de Estados Unidos, este ha dicho que dará prioridad a la política de apaciguamiento del régimen.

“Biden enfrentará una intensa presión por parte de los simpatizantes del régimen, quienes abogarán por que se use la próxima Cumbre de las Américas, a finales de 2021, para señalizar un reinicio en las relaciones con La Habana mediante una invitación al régimen cubano a EE. UU. para ese evento hemisférico. Bajo ninguna circunstancia se le debe otorgar al régimen de Castro y Díaz-Canel una victoria de relaciones públicas tan grande”, escribió el republicano en el medio cubano.

Para el senador, la administración de Biden podría tumbar las restricciones a las personas que se sabe que han cometido delitos “como miembros de la familia Castro y sus secuaces”.

Asimismo, señaló que Biden podría premiar la dictadura al priorizar “una política ingenua hacia un acercamiento” y lo que llevaría a que el mandatario abra las relaciones comerciales con la dictadura. “Eso sería mediado a través de la organización títere del ejército cubano, el Grupo de Administración Empresarial S.A. (Gaesa), un conglomerado actualmente en la lista de entidades restringidas por parte del Departamento de Estado”.

El republicano también dijo que para el nuevo presidente el acercamiento minimizaría la amenaza a la seguridad nacional. “Las alianzas del régimen cubano con los principales líderes autoritarios del mundo y los peores violadores de Derechos Humanos: Xi en China, Putin en Rusia, los Mullahs en Irán, Kim en Corea del Norte, los Ortega en Nicaragua y Maduro en Venezuela, hablan por sí mismos”.

El acercamiento también representaría una amenaza a la seguridad nacional de Cuba y, además, “representaría el hacerse de la vista gorda mientras Cuba continúa apoyando al narco-régimen ilegítimo de Maduro en Venezuela”.

Rubio añadió en su columna publicada en el medio cubano: “La dictadura cubana ha apoyado, en repetidas ocasiones, y les ha brindado refugio a Organizaciones Terroristas Extranjeras (FTO, por sus siglas en inglés) designadas por el Departamento de Estado. Esto incluye a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y al Ejército de Liberación Nacional (ELN), que el año pasado cometió un atentado suicida contra la Academia Nacional de Policía en Bogotá, Colombia. Ese apoyo flagrante de La Habana a organizaciones terroristas resultó en que la administración Trump volviese a nombrar formalmente a Cuba como un estado patrocinador del terrorismo. Una designación que el presidente Biden no debería cambiar bajo ninguna circunstancia”.

Asimismo, dijo que con el “acercamiento” de Biden, Cuba no cambiará las costumbres, ni cambiará la represión a los opositores, ni la violación a los derechos humanos.

“También podemos anticipar que la administración Biden intentará integrar a la dictadura en la comunidad latinoamericana a través de esfuerzos como la cooperación policial”, añadió Rubio, quien, además, señaló que con “ese tema” le ha ido bien a Maduro.

Así mismo, recordó que el régimen de Castro y Díaz-Canel está involucrado en una brutal represión contra el Movimiento San Isidro (MSI) y que no se puede garantizar la seguridad de los diplomáticos en la isla.

Finalmente, el republicado dijo que Biden debe tomar una postura, que el acercamiento será una recompensa el régimen autoritario y que el nuevo mandatario no debe ignorar las voces de quienes conocen del tema y que el régimen de La Habana no puede ser recompensado por sus atrocidades.

Rubio es presidente interino del Comité de Inteligencia del Senado y presidente del Subcomité de Relaciones Exteriores sobre Delincuencia Transnacional, Seguridad Civil, Democracia, Derechos Humanos en el hemisferio occidental.