Expertos no han logrado demostrar si en realidad existe un día en el año que sea más deprimente que cualquier otro, sin embargo, el Blue Monday fue consolidado por la cultura moderna.
Todo empezó en 2005 cuando un reconocido canal de televisión de Reino Unido envió a sus periodistas un anuncio promocional, en el que con la ayuda de un psicólogo habían calculado “el día más miserable del año”.
Según información de CNN, el medio aparentemente llegó a esa conclusión con una fórmula compleja desarrollada por el psicólogo británico Cliff Arnall, quien consideró factores como el clima para idear el punto anímico más bajo en las personas.
El anuncio iba encaminado a que estas reservaran vacaciones, según su estado de ánimo. De acuerdo con el experto, los que más probabilidad tenían de comprar un tiquete de avión para irse a un lugar soñado era quienes se sentían más deprimidos. A Arnall se le pidió que inventara el mejor día para reservar un viaje de vacaciones, por lo que pensó en las razones por las cuales las personas querrían tomarse unas vacaciones, y así nació el día más sombrío del año.
“En general, hay más tristeza en el invierno y en enero no es infrecuente la tristeza general entre la gente”, dijo el doctor Ravi Shah, psiquiatra del Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia.
Algunos fenómenos han servido para justificar el famoso días, pues en Japón una investigación señaló que en 2009 el número de suicidios los días lunes entre hombres de ese país fue significativamente mayor que en otros días de la semana, especialmente para aquellos en la categoría de “edad productiva”, lo que señalaría que la estructura de la semana laboral y las luchas económicas eran las culpables.
Aunque este día no tiene ningún mérito científico, el psicólogo Arnal aseguró a CNN que mucha gente lo reconoce por sí mismo.
Luego de este gran éxito publicitario, el hombre ha firmado con algunas campañas de marketing que han usado su idea para atraer turismo de invierno en algunos lugares paradisíacos.
“No me arrepiento en absoluto”, dijo, y agregó que ha “usado los medios” en varias ocasiones con la intención de iniciar conversaciones sobre psicología.
Lo que algunos colegas le recriminan a Arnall es que haya recibido un pago de más de mil dólares por crear el Blue Monday. Hay quienes señalan que no es la forma correcta de crear conciencia y mucho menos conseguir dinero, trivializando una enfermedad tan grave como la depresión.
Los días grises sí alteran las emociones
El Trastorno Afectivo Estacional o TAE es una forma de depresión que las personas experimentan generalmente durante los meses de otoño e invierno, cuando hay menos luz solar. Los meses más difíciles para las personas con TAE en Estados Unidos tienden a ser enero y febrero, pero mejora con la llegada de la primavera.
Según cifras de Psychology Today, se estima que el TAE afecta a diez millones de estadounidenses, y que otro 10 a 20 % puede tener síntomas leves. Para el 5 % de los adultos que experimentan TAE, aproximadamente, el 40 % del año tienen síntomas que pueden ser abrumadores e interferir con su vida diaria.
La condición se ha relacionado con un desequilibrio bioquímico en el cerebro, provocado por las horas de luz más cortas y menos luz solar en invierno. A medida que cambian las estaciones, las personas experimentan un cambio en su reloj interno biológico, o ritmo circadiano, que puede hacer que no estén sincronizados con su horario regular.
Algunos síntomas incluyen sentimientos de tristeza, pérdida de interés en actividades que antes disfrutaba, sentimientos de inutilidad o culpa, problemas para concentrarse o tomar decisiones y pensamientos de muerte o suicidio e, incluso, intentos de suicidio.
El TAE puede comenzar a cualquier edad, pero generalmente comienza entre las edades de 18 y 30 y es más común en mujeres que en hombres.