La guerra en Siria ha acabado con la vida de millones de personas y ha dejado casi 6,5 millones de personas registradas como refugiados en otros países. Un conflicto, que lleva ocho años y 337 días, ha hecho que los más jóvenes no conozcan lo que es la paz, desde que nacen. En medio del caos que vivió la ciudad de Saraqeb, ciudad estratégica que se ubica en el cruce de dos autopistas (M5 Y M4), en el este de la provincia nororiental de Idlib, luego de que el ejército sirio tomara la ciudad, en el avance ofensivo que adelantaba en el considerado último bastión opositor (yihadista), un padre de familia, Abdullah, sorprendió al mandar un mensaje de esperanza y burlas la realidad para proteger a su hija. 

En el vídeo, compartido por múltiples usuarios en redes sociales, de pie junto a su padre, con una camisa rosada de mangas largas rayadas, la pequeña, sin comprender lo que está sucediendo, se ríe cada vez que el sonido aturdidor de una bomba se oye a lo lejos. Su padre parece acompañarla con sonrisas en el momento de ‘algarabía’, cada vez que ella escucha un estruendo y ríe.¿Bomba o avión? le pregunta su padre en el vídeo, abriendo los ojos de forma juguetona para que ella responda. Bomba, dice la pequeña. “Sí, cuando caiga nos reímos”, agrega e instantes después el sonido de una de estas aparece. La pequeña estalla en una carcajada. ¿Te hace gracia? le pregunta su padre, sonriendo y mirándola de reojo. ¡Sí, es divertido!, contesta ella. 

“Se me parte el corazón”, y “¿qué no hace un padre o una madre por sus hijos” son algunas de las reacciones de los usuarios que en Twitter han manifestado su asombro, por la creatividad de Abdullah para proteger a su hija y convertir miedo en risa, y tristeza por la situación que se vive en Siria. ¿Qué es lo que está pasando?El conflicto que se vive en el noroeste de Siria ha alcanzado niveles extremos. Al menos 90.000 personas han huido, debido a la ofensiva que comenzó el régimen de Bashar al Assad en diciembre de 2019, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En un comunicado dado a conocer este lunes, Mark Lowcock, secretario general adjunto de las Naciones Unidas Humanitarias, dijo que la mayor cantidad de personas que componen esos 90.000 desplazados son mujeres y niños. “Están traumatizados y obligados a dormir fuera con temperaturas gélidas porque los campos (de refugiados) están llenos. Las madres queman plásticos para calentar a los niños. Bebés y niños pequeños mueren de frío”, dijo Lowcock. 

De acuerdo con el secretario, la violencia en la parte noroeste de Siria es indiscriminada. “Las escuelas están suspendidas, muchas instalaciones de salud han cerrado. Existe un grave riesgo de brotes de enfermedades. La infraestructura básica se está desmoronando”, aseguró.La tensión en esa zona de Siria, que fue creada en el año 2018, creció luego del intercambio de una serie de ataques entre militares turcos y sirios. Ante esta situación, según lo señaló Sputnik News, Bashar al-Assad, presidente de Siria, aseguró que el Ejército sirio continuará en la liberación de Alepo, ciudad en la que en los últimos días las fuerzas de Al-Assad ganaron terreno, e Idlib.