El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, hizo oficial este miércoles 29 de mayo la salida del hasta ahora embajador en Israel, Frederico Meyer, al nominarle como representante del país en la Conferencia de Desarme de Ginebra.
La nominación de Meyer para representar a Brasil en este foro en Suiza ha sido publicada este miércoles en el Diario Oficial de la Unión e implica ‘de facto’ que la representación diplomática la ostentará el actual encargado de negocios, Fábio Moreira Farias, degradando, por tanto, el nivel de las relaciones, informó G1.
Meyer se encontraba fuera de Israel desde que fue llamado a consultas a finales de febrero, en medio de la crisis diplomática surgida tras las críticas del presidente Lula a la cruenta ofensiva del Ejército israelí sobre la Franja de Gaza. “No había condiciones para que él regresara” a Israel, dijo una fuente diplomática a AFP.
Lula enfadó al Gobierno de Israel después de que comparara los ataques contra la población palestina con el Holocausto, lo que provocó rápidamente que el presidente brasileño fuera declarado ‘persona non grata’.
En febrero, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, acusó al gobierno israelí de “genocidio” y comparó su campaña militar en la Franja de Gaza con “cuando Hitler decidió matar a los judíos”.
En respuesta, Israel declaró a Lula “persona non grata” y convocó a Meyer a una reunión en el centro memorial del Holocausto Yad Vashem en Jerusalén.
Brasil finalmente llamó a consultas a su embajador en Tel Aviv y convocó al representante israelí en Brasilia.
La fuente señaló que “la humillación a la que (Meyer) fue sometido” durante el episodio en el Yad Vashem empujó a Brasil a decidir el retiro definitivo del embajador. “No había condiciones para que él regresara (a Israel) Esa fue la evaluación”, añadió.
La representación brasileña en Israel quedará a cargo del encargado de negocios, Fabio Farias, y por lo pronto el gobierno de Lula no nombrará un nuevo embajador. “No creo que haya novedades de inmediato”, dijo la fuente.
Más de 36.000 personas, la mayoría civiles, han muerto en Gaza desde que comenzó el conflicto entre Israel y Hamás, según el último balance del movimiento islamista palestino que gobierna ese territorio.
Según el funcionario brasileño, la continuación de las agresiones “no ayudan en el diálogo de Israel con el mundo”. “No muestran disposición para dialogar”, añadió.
*Con información de AFP y Europa Press.