Este viernes, en las inmediaciones de la Asamblea Nacional (AN) de la capital venezolana, se desarrolló una concentración en la que simpatizantes del empresario colombiano Álex Saab exigieron que sea puesto en libertad. Saab es acusado de ser el presunto testaferro de Nicolás Maduro y fue extraditado a Estados Unidos en octubre de 2021.

“Hoy nos encontraremos con el pueblo de CCS en su concentración de solidaridad con nuestro diplomático Álex Saab, brutalmente secuestrado en EE. UU., en violación de las leyes y tratados internacionales”, señaló el presidente del órgano parlamentario, Jorge Rodríguez. Los organizadores de la concentración fijaron las 10.30 a. m. (tiempo local) como la hora programada para reunirse.

En su intervención, durante la convocatoria, Rodríguez aseveró que Saab había buscado a nivel nacional y fuera del país caribeño formas para asistir con alimentos y medicamentos a la población. También apuntó que el Gobierno norteamericano, según él, no ha podido encontrar pruebas que le relacionen con algún delito.

“Álex Saab era uno de esos hombres y mujeres dignos que fueron por todo el planeta arriesgando su seguridad, su propia vida para burlar acciones que están reñidas con el derecho internacional. El bloqueo ‘brutal’ sometido por Donald Trump en contra de la patria venezolana. Ese es el único delito por el cual se vuelca (...) el odio de las hienas del sistema de justicia de los Estados Unidos”, enfatizó quien también representa al oficialismo en los diálogos con la oposición.

La movilización se desarrolló en el marco de audiencias para determinar si él puede gozar o no de inmunidad diplomática y en medio de cuestionamientos sobre la potestad de Estados Unidos para dirimir al respecto. Este lunes un tribunal de Florida empezó a escuchar, sobre ese punto, el testimonio de funcionarios venezolanos.

“Estamos acá en virtud de esta línea de lucha antiimperialista (...) que, desde la dirección de nuestro partido, hemos venido asumiendo. Para que se sepa allá en Florida (...) que es un arma de desestabilización lo que han pretendido contra el pueblo, gobierno y democracia de Venezuela”, señaló por su parte el diputado Jorge Luis Chirinos.

De acuerdo con El País, los abogados de Saab sostienen que cuando su defendido fue arrestado, mientras hacía escala en Cabo Verde, estaba ejerciendo una tarea “diplomática” rumbo a Irán. Lo anterior, supuestamente, con el objetivo de comprar combustible y garantizar asistencia humanitaria.

La extradición de Saab repercutió directamente en los diálogos que el año pasado había intentado retomar el chavismo y la oposición venezolana. Incluso, en la reanudación que se puso en marcha en noviembre de este año, su futuro judicial volvió a hacer eco. El oficialismo aseguró que se trataba de un “secuestro”.

Los fiscales, a cargo del caso, insisten que el empresario tergiversó aproximadamente 350 millones de dólares. Voz de América informó que es sospechoso de liderar una trama a favor del gobierno de Nicolás Maduro, mediante el programa CLAP cuya creación buscó la distribución de comida en el vecino país.

El mes pasado se confirmó que la esposa de Saab, haría parte de la mesa de negociaciones en México con la Plataforma Unitaria. En ese momento el chavismo reiteró su llamado para que este fuera puesto en libertad y calificó su detención y extradición como “ilegal”.

“Saludamos la incorporación de la defensora de derechos humanos, Camilla Fabri de Saab, a la delegación del Gobierno de Venezuela, mientras se produce la incorporación plena de nuestro diplomático”, señaló el oficialismo en un comunicado.

Según medios locales, sobre Fabri hay una investigación por supuesto lavado de dinero. Hace ocho meses se anunció una orden de arresto domiciliario contra dos de sus familiares: Patrizia y Arianna Fiore.