El principal candidato de la oposición para las elecciones presidenciales en Venezuela, Edmundo González Urrutia, ha afirmado que quiere representar a “todos los que quieren un cambio” y ha apelado a la unidad para “recuperar la democracia” en el país sudamericano, tras un convulso proceso de inscripción que le ha sorprendido incluso a él mismo.
González ha terminado siendo el candidato oficial de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) tras la imposibilidad de inscribir a la vencedora de las primarias de 2023, María Corina Machado, y a su teórica sustituta, Corina Yoris. “Fue una decisión que no esperaba hace unos días”, admitió en un vídeo divulgado en redes sociales.
De esta manera, ha justificado que haya esperado unos días para enviar un mensaje a los venezolanos y en el que ha querido agradecer a las principales figuras opositoras su respaldo, entre ellos el gobernador Manuel Rosales, que también llegó a postularse ante el Consejo Nacional Electoral, y la propia Machado, a la que catalogó como “líder de la oposición”.
González Urrutia aseguró que su candidatura goza ahora de “unanimidad”. “Es la hora de marchar unidos por la recuperación de nuestra democracia. De poner a un lado nuestras diferencias y trabajar juntos por alcanzar el triunfo electoral”, dijo, con la vista puesta ya en el 28 de julio.
El candidato opositor abogó por construir “una Venezuela de todos, donde nadie sienta temor a ser perseguido por sus ideas”, donde “se garantice la autonomía e independencia de los poderes públicos”. En la “transición” que atisba, se garantizaría “la libertad de los presos políticos” y “el retorno de los exiliados”.
González, que ha reivindicado su experiencia en diplomacia, también ha abogado por unos poderes públicos independientes, para que Venezuela “vuelva a ser una referencia democrática internacional”.
El representante de la Plataforma se enfrentará a finales de julio al presidente, Nicolás Maduro, que repite como punta de lanza del chavismo. Entre las cuestiones que siguen pendientes de cara a esa cita está la posible presencia de observadores, clave para la legitimación de la votación a ojos de la comunidad internacional.
Oficina de DD. HH. de la ONU vuelve a Venezuela
La oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos volverá a operar en Venezuela, dos meses después de su expulsión, tras manifestar su preocupación por el arresto de una activista y experta en temas militares.
El presidente Nicolás Maduro hizo el anuncio el martes en compañía del fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, quien investiga a Venezuela por posibles crímenes de lesa humanidad y también abrió una delegación de su despacho en Caracas.
“He recibido la propuesta de invitar nuevamente a la apertura de la oficina del alto comisionado de derechos humanos de la ONU, Volker Türk, a estar en nuestro país, en Venezuela. Estoy de acuerdo”, dijo el mandatario en un acto en el palacio presidencial de Miraflores. “Superemos las diferencias, el conflicto que tuvimos”.
No está claro cuándo volverá la delegación del alto comisionado, expulsada el 15 de febrero tras expresar “profunda preocupación” por la detención de Rocío San Miguel, abogada especializada en temas militares, acusada por terrorismo por sus supuestos vínculos con un plan para asesinar a Maduro.
El Gobierno condenó la reacción y acusó entonces a la oficina de “convertirse en el bufete particular del grupo de golpistas y terroristas”.
Con información de Europa Press y AFP*