El Parlamento indonesio ha venido trabajando en normativas que radicalizan aún más el régimen actual, puesto que además de estar buscando que se castigue con cárcel las relaciones extramatrimoniales, también se prepara una ley que impida insultar a cualquier alto funcionario del Gobierno, especialmente al presidente.

Pues bien, medios locales han informado que el país asiático busca incorporar estas normativas dentro de una reforma al Código de Penal Nacional, modificaciones que se espera queden radicadas desde este año. Por lo que, las políticas mencionadas ya estarían casi listas, al igual que la redacción del total del código.

“Estamos orgullosos de tener un Código Penal que está en línea con los valores de Indonesia”, fueron las palabras del viceministro de Justicia de Indonesia, Edward Omar Sharif Hiariej, en entrevista con la agencia Reuters, indicando que el código que tenían data de 1945.

Con respecto a una de las normativas más polémicas, la de las relaciones sexuales fuera del matrimonio, se ha indicado que serán los familiares cercanos o los afectados los que podrán denunciar este tipo de conductas, y afectaran a parejas unidas por el contrato civil o quienes convivan en unión libre.

Las penas para aquellos a los que se les compruebe que tuvieron parte en este tipo de relaciones, será de hasta un año de cárcel, y una de las preocupaciones adicionales de la población es que también afecta a los extranjeros que visiten el país, por lo que el algunos ciudadanos han manifestado su descontento, afirmando que este tipo de políticas podrían afectar la economía del país, entre otros, según indicó Fox News.

Y respecto a las normativas sobre la prohibición de insultar a funcionarios públicos, estos actos pueden llegar a tener condenas de hasta 3 años de cárcel, mientras que si un ciudadano llega a insultar algún tipo de emblema nacional, entonces pueden llegar a pagar hasta 5 años de cárcel, según el medio citado.

Terremoto en Indonesia

El sismo que sacudió la isla indonesia de Java el lunes dejó al menos 310 muertos, entre ellos muchos niños, informó la agencia nacional de gestión de catástrofes este 26 de noviembre. Luego del terremoto de magnitud 5,6 provocó desplazamientos de tierra y destruyó edificios en la parte occidental de la isla, declaró el jefe de la agencia, Suharyanto, que como muchos indonesios solo tiene un nombre.

Según Henri Alfiandi, jefe de los servicios de rescate nacionales, las búsquedas continuarán por lo menos hasta el lunes si no se encuentran todos los cuerpos.

“Los problemas son la inestabilidad del suelo, el grosor de los desprendimientos agravados por las continuas lluvias y el temor a las réplicas”, declaró a Kompas TV.

Los rescatistas encontraron el viernes el cuerpo de una niña de siete años entre los escombros de una casa en el distrito de Cianjur, cerca del epicentro.

“El cuerpo fue inmediatamente entregado a la familia. La familia lo aceptó y la enterraron”, dijo Jeksen Kolibu, un socorrista de 28 años.

Entre las víctimas hay muchos niños y algunos estaban en la escuela cuando se produjo el temblor.

Suharyanto informó que más de 2.000 personas resultaron heridas tras el sismo, 56.000 casas fueron dañadas y más de 62.000 personas tuvieron que evacuar sus hogares.

Indonesia, situada en el “cinturón de fuego” del Pacífico, donde se tocan las placas tectónicas, sufre regularmente a terremotos o erupciones volcánicas.

*Con información de la AFP.