‘The New York Times‘ reveló que el presidente Donald Trump se refugió en el búnker de la Casa Blanca el pasado 29 de mayo, cuando un grupo de manifestantes actuó violentamente contra la mansión ubicada en Washington. Las personas protestaban en contra de racismo y el abuso policial a raíz del caso George Floyd.
"Trump pasó casi una hora en el búnker, que fue diseñado para su uso en emergencias como ataques terroristas", señaló un republicano no identificado al medio estadounidense. Los agentes del Servicio Secreto consideraron que la seguridad de Trump estaba en riesgo ante la ola de violencia que desencadenó la muerte del ciudadano negro en Minneapolis, pero que se esparció por todo el país hasta llegar al parque Lafayette, ubicado cerca a la Casa Blanca. Además, CNN confirmó que la primera dama Melania Trump y su hijo Barron también fueron llevados al búnker junto al mandatario. Washington en toque de queda Con el antecedente del viernes pasado, Donald Trump se abstuvo de salir públicamentes a hablar sobre las manifestaciones el día domingo que esta vez subieron de nivel y llevaron a que se decretara el toque de queda en Washignton desde las 11 p.m. hasta las 6:00 a.m. del lunes.
Frente a la Casa Blanca, la policía lanzó gases lacrimógenos para dispersar a manifestantes que habían desafiado el toque de queda. En consecuencia, la mansión apagó completamente las luces, algo que no sucedía desde 1889.
Para evitar nuevos disturbios, miles de soldados de la Guardia Nacional fueron desplegados en 15 estados y en Washington, y se dispuso el toque de queda en varias ciudades además de la capital, entre ellas Houston y Los Ángeles.
Donald Trump ha intensificado el malestar en Estados Unidos, luego de decir que el Servicio Secreto estaba listo para soltar “los perros más feroces y usar las armas más amenazantes que yo haya visto” si los manifestantes enfurecidos hubiesen cruzado la valla de seguridad de la Casa Blanca.