El pasado 5 de agosto, una noticia escabrosa conmocionó a las autoridades de Tailandia y Colombia, tras el reporte del asesinato de Edwin Arrieta, médico cirujano colombiano, a manos de su pareja, el chef español Daniel Sancho.

El hecho se habría ejecutado en la isla de Koh Phangan, en Tailandia, lugar en el que el cordobés estaba pasando unas vacaciones junto al europeo. La noticia estalló cuando las autoridades del país asiático encontraron el cuerpo del galeno desmembrado en varias bolsas.

Las autoridades de inmediato se pusieron en la búsqueda del homicida, que terminó con la captura y posterior confesión del cocinero. En un interrogatorio admitió que él mismo denunció la desaparición y que Arrieta murió por un golpe en la cabeza.

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Luego de su confesión, el español fue llevado a una cárcel tailandesa que es considerada “amable”. De acuerdo con el medio El Español, el hombre de 29 años compartirá celda con cerca de 20 personas y tendrá que dormir en el suelo.

Desde el pasado lunes, ingresó a un aislamiento por Covid-19 en la prisión de Samui, ubicada en la zona sur de ese país. Sancho tendrá una vestimenta de recluso, que es formada por un pantalón y camiseta ancha de color marrón.

En la celda compartida tendrá tres piezas de tela para usarlas como colchón, sábana y almohada, que están ubicadas en el suelo.

Las celdas más pequeñas en Samui tienen una capacidad para 20 reos. Las celdas grandes pueden acoger hasta 30 o 40 prisioneros. Los baños tampoco son los mejores y tanto los retretes como las duchas deben ser compartidos.

El día en la cárcel comienza a las 5 de la mañana, hora en que los guardias despiertan a los presos y hacen un primer recuento. Luego dan paso al rezo budista. A las 7 de la mañana reciben el desayuno y a las 8 de la mañana deben hacer una fila para cantar el himno nacional.

Finalmente, acuden a las duchas luego de un segundo conteo y empiezan a hacer sus tareas asignadas por el comité de la prisión. También pueden hacer trabajos de reinserción.

El almuerzo es al medio día y a las 3 de la tarde vuelven a ser contados. Finalmente, a las 6 de la tarde se hace el último rezo y se acuestan a dormir a las 9 de la noche.

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Nuevos detalles del crimen contra el cirujano colombiano

Hace cinco horas salió a la luz que el individuo que previamente admitió su responsabilidad, Daniel Sancho, habría compartido los horribles detalles del vil asesinato con su novia y amigos, después de haber “propinado dos puñetazos mortales a Edwin”.

Estas afirmaciones fueron hechas públicas por el periodista Miguel Frigenti, a través de su cuenta de Instagram el pasado domingo, tras haber conversado con las personas más cercanas al joven chef de 29 años. De acuerdo a lo que le han relatado, “Daniel habría conseguido un teléfono para ponerse en contacto con sus amigos y con una chica con la que mantenía una relación, identificada como Paula”.

En estas supuestas llamadas, “la versión que habría compartido con sus amigos y su novia Paula es que mató al cirujano de dos puñetazos. Según esta fuente cercana a Daniel, la víctima, Edwin Arrieta, habría invertido dinero en algunos de los emprendimientos de Daniel”.

De igual forma, según las fuentes de Frigenti, Sancho le habría comunicado a los amigos a los que contactó y a su novia “que no se preocuparan por él, pero que su estado emocional estaba muy deteriorado y que, en este momento, tenía la intención de apartarse de todo”, describió el informante.

Sancho aseguró que el médico colombiano estaba obsesionado con él. | Foto: Foto 1: Instagram @danisanchobanus / Foto 2: Twitter @AndresCalleA