La intervención del presidente salvadoreño, Nayib Bukele, en el marco de las Naciones Unidas, ha sido una de las que más ha dado de qué hablar. Además del énfasis que hizo en la “reconstrucción” de su país, el “jalón de orejas” a Estados Unidos, país anfitrión del evento, es el que remarcó su paso por Nueva York.
Tras culminar su mensaje (ad portas de abandonar el recinto) y, sin vacilar a la hora de contestar en inglés, el mandatario centroamericano destacó que más allá del mensaje de su homólogo, Joe Biden, “el formato de la Asamblea General de la ONU es algo aburrido. En realidad no sabemos cuánta gente está prestando atención”.
En su respuesta al periodista que lo abordó, al término de su participación (este lunes 19 de septiembre), Bukele aseguró en un perfecto dominio del inglés que pese a no estar de acuerdo con el formato “tenemos que venir y hacer nuestro trabajo”.
Al ser preguntado sobre, los que, a su juicio, pueden ser los resultados de este encuentro (el número 77), subrayó que, son “cien presidentes hablando”, pero que “al final el resultado será nada”.
¿Cómo es percibido el mensaje ante la ONU?
La intervención de Bukele “está en línea de lo que él ha demostrado tanto frente a la prensa internacional, Estados Unidos y la ONU”, señaló el experto en política latinoamericana y profesor de la Universidad Javeriana, Miguel Gomis.
“La ONU tal como existe y funciona hoy tiene muchos problemas y, evidentemente, decir que el formato es obsoleto (...) no es tan revolucionario”, aseguró Gomis.
El experto destacó que Bukele está dispuesto a continuar en la línea que lo ha marcado en dos años e “intentar no tener en cuenta los comentarios de Estados Unidos u organismos internacionales”. En su lugar “seguir con su visión”, el mayor control frente a las pandillas y una modernización del país que está sujeta a factores como el bitcoin.
En entrevista con el medio estadounidense FOX NEWS Bukele dijo que la “nueva ola de gobernanza elimina el sentido común y empieza a hacer cosas al revés”, en relación con la forma en la que otros países podrían percibir su gestión.
“No nos enfocamos solo en la delincuencia, por supuesto vimos otros temas: educación, salud, obras públicas, inversión (...), agregó el mandatario y en materia de seguridad “las vidas de las personas son lo más importante, por eso nos enfocamos más en la delincuencia”.
Finalmente, cuando se le interrogó por la política que su gobierno maneja sobre las pandillas y el control en los centros penitenciarios Bukele remarcó que “la mayoría de las cárceles en América Latina son cuarteles generales para el crimen (...)”, y que ahora en El Salvador “comunicarse con el exterior es imposible”.
Bukele buscará reelección en 2024
A propósito del aniversario 201 de la independencia salvadoreña el mandatario anunció, en transmisión nacional, que se postulará nuevamente como candidato para los comicios de 2024.
“Luego de conversarlo con mi esposa Gabriela y con mi familia, anuncio al pueblo salvadoreño que he decidido correr como candidato a la Presidencia de la República”.
Aunque sin hacer alguna mención directa Bukele señaló que su decisión había sido tomada sabiendo que “más de algún país desarrollado no estará de acuerdo”, y que le prolongaría como jefe de Estado por otros cinco años.
Pese a que la Constitución de la nación centroamericana no da vía libre a que un mandatario puede buscar de manera inmediata su reelección en 2021 la Corte Suprema de Justicia (CSJ) entregó una resolución para que esa intención pudiera salir adelante.