El denominado “tsunami sin mar” tiene preocupada a la comunidad científica del planeta. Quince millones de personas de todo el mundo corren el riesgo de sufrir inundaciones causadas por lagos glaciares, y solo cuatro países concentran más de la mitad de las personas expuestas.
Un equipo internacional de científicos dirigido por la Universidad de Newcastle elaboró la primera evaluación mundial de las zonas con mayor riesgo de inundaciones por desbordamiento de lagos glaciares e identificó las áreas prioritarias para su mitigación.
A medida que el clima se calienta, los glaciares retroceden y el agua de deshielo se acumula en la parte delantera del glaciar, formando un lago.
Estos lagos pueden reventar repentinamente y crear una crecida rápida de lago glaciar (GLOF, por sus siglas en inglés) que puede extenderse a gran distancia del lugar original, más de 120 kilómetros en algunos casos. Las GLOF pueden ser muy destructivas y dañar propiedades, infraestructuras y terrenos agrícolas, además de provocar importantes pérdidas de vidas humanas.
El número de lagos glaciares aumentó rápidamente desde 1990 como consecuencia del cambio climático. Al mismo tiempo, el número de personas que viven en estas cuencas también aumentó considerablemente.
El equipo de investigación estudió 1.089 cuencas de lagos glaciares de todo el mundo y el número de personas que viven a menos de 50 kilómetros de ellas, así como el nivel de desarrollo de esas zonas y otros indicadores sociales como marcadores de vulnerabilidad a las GLOF.
Los resultados pusieron de manifiesto que 15 millones de personas viven a menos de 50 km de un lago glaciar y que Asia de alta montaña (que abarca la meseta tibetana, desde Kirguistán hasta China), tiene el mayor peligro de GLOF, con 9,3 millones de personas potencialmente en riesgo. India y Pakistán cuentan con unos 5 millones de personas expuestas, aproximadamente un tercio del total mundial.
La investigadora principal, Caroline Taylor, estudiante de doctorado en la Universidad de Newcastle, destaca que “este trabajo pone de manifiesto que lo más peligroso no son las zonas con mayor número de lagos o con un crecimiento más rápido.
Lo que determina el peligro potencial de una GLOF es el número de habitantes, su proximidad a un lago glaciar y, lo que es más importante, su capacidad para hacer frente a una inundación”.
La investigación también destaca a Perú como uno de los cuatro países, junto con India, Pakistán y China, que representan más de la mitad del número de personas de todo el mundo expuestas al peligro potencial de las inundaciones de lagos glaciares.
El equipo de investigación señala la relativa falta de estudios sobre el peligro de los lagos glaciares en los Andes y afirma que urge seguir investigando para comprender mejor el peligro potencial de GLOF a nivel local en esta zona, debido al elevado número de personas que viven en las proximidades de los lagos glaciares y a su reducida capacidad para hacer frente al impacto de una GLOF.
La mitad de los glaciares de la Tierra, incluso el más pequeño, están condenados a desaparecer a finales del siglo debido al cambio climático, reveló un estudio la semana pasada.
El trabajo publicado por la prestigiosa revista Science entrega las proyecciones más precisas hasta ahora sobre el futuro de unos 215.000 glaciares del mundo.
Los autores del estudio advierten sobre la importancia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que causan el cambio climático, para limitar el derretimiento de los glaciares y el consecuente aumento del nivel del mar.
Deshielo total
De momento, el mundo se encamina hacia un calentamiento de 2,7 °C, que conduciría a un deshielo casi total en Europa Central, el oeste de Canadá y Estados Unidos, e incluso en Nueva Zelanda.
Estas proyecciones, más alarmantes que las que tienen actualmente los expertos climáticos de la ONU (IPCC), fueron posibles gracias a la obtención de nuevos datos sobre las variaciones de masa de cada glaciar en el mundo durante las últimas décadas.
Los datos permitieron ajustar mejor el modelo matemático que proyecta escenarios a futuro.
También se consideraron procesos que no habían incluido estudios previos, como el efecto del cubrimiento por escombros (rocas, etc.), o el desprendimiento de icebergs en el mar a partir de determinados glaciares (fenómeno conocido como calving).
Los glaciares objeto del estudio representan solo “el 1% de todo el hielo de la Tierra”, pero son “mucho más sensibles” que otras extensiones de hielo por encontrarse en regiones donde las temperaturas están más cerca del punto de fusión.
Por esa razón, “han contribuido al aumento en el nivel del mar casi tanto como los casquetes polares de Groenlandia y la Antártida juntos durante las últimas tres décadas”, destacó Hock.
La eventual desaparición de glaciares también producirá consecuencias en los recursos hídricos, pues representan una reserva de agua crucial para unas 2.000 millones de personas.
*Con información de AFP y Europa Press.