El Servicio de Ambulancias de Londres y otras organizaciones sanitarias han atendido al menos a 435 personas mientras estaban en la cola para acceder a la capilla ardiente de la reina Isabel II en el palacio de Westminster.

Según detalló el Servicio Nacional de Salud, la mayoría de los casos han estado relacionados con desmayos y algunas lesiones en la cabeza, producidas como consecuencia.

Así, el Servicio de Ambulancias de Londres le recordó a quienes se pongan en la fila la importancia de llevar consigo medicamentos para dolores de cabeza o musculares y ropa adecuada para las cambiantes condiciones meteorológicas de Londres.

Empleados del servicio médico han reconocido que en los próximos días es probable que aumente la demanda de sus servicios, con lo que han reforzado su personal con otros 300 empleados adicionales, especialmente para el día del funeral, el lunes.

22 horas de cola

En Westminster Hall, el féretro de Isabel II yace sobre un catafalco púrpura, cubierto por el estandarte real, la corona imperial y el cetro, símbolos de poder de la monarquía británica.

La capilla ardiente está abierta hasta la 6:30 a. m. del lunes, pocas horas antes del funeral, y miles de británicos siguen haciendo cola para visitarla.

La gente hace cola antes del inicio de la fila de más de cuatro millas cerca del Puente de la Torre para presentar sus respetos a la difunta Reina Isabel II durante el Estado Acostado, en Westminster Hall en Londres, el jueves 15 de septiembre de 2022. | Foto: Copyright 2022 The Associated Press. All rights reserved.

La enorme afluencia obligó a las autoridades el viernes a impedir durante horas que más personas se sumasen a la kilométrica fila que discurre a lo largo del río Támesis. La espera rondaba entonces las 14 horas. Poco después de su reapetura, el Gobierno advirtió de que era de 22 horas como mínimo.

Allí fue visto el exjugador del Manchester United y el Real Madrid David Beckham, de 47 años. Vestido con traje, corbata y abrigo negros, llevando una gorra y un paraguas, dijo haber llegado a las dos de la madrugada. Doce horas más tarde se lo veía saliendo de la capilla ardiente, donde inclinó sobriamente la cabeza frente al féretro y se secó una lágrima.

“Es muy emotivo, y el silencio y la atmósfera en la sala son muy difíciles de explicar, pero todos estamos aquí para dar las gracias a su majestad por ser tan amable, cariñosa y reconfortante a lo largo de los años”, dijo Beckham a un grupo de periodistas, entre ellos de la AFP.

El rey y sus hermanos al lado de Isabel II

Los hijos de Isabel II, encabezados por el rey Carlos III, velaron el viernes el féretro de su madre en Westminster Hall, la capilla ardiente para la que muchos británicos están dispuestos a esperar en colas de más de 22 horas.

Con rostros circunspectos, Carlos III, de 73 años, y sus hermanos Ana (72), Andrés (62) y Eduardo (58) entraron en el majestuoso salón, la parte más antigua del Parlamento británico, y en un silencio sepulcral avanzaron hasta el féretro.

Príncipe Guillermo, Príncipe de Gales, Príncipe Harry, Duque de Sussex, Vicealmirante, Sir Timothy Lawrence, Rey Carlos III, Princesa Ana, Princesa Real y Príncipe Andrés, Duque de York camina detrás del ataúd durante la procesión del estado acostado de la reina Isabel II el 14 de septiembre de 2022 en Londres, Inglaterra. | Foto: REUTERS

Subieron ceremoniosamente tres de los cuatro peldaños rojos sobre los que está situado el catafalco y se colocaron a sus cuatro costados, con la cabeza gacha de espaldas al féretro.

Allí permanecieron 12 minutos, ante la mirada atenta de los británicos que seguían desfilando frente a los restos de la reina para darle su último adiós. Después, abandonaron el salón con la misma solemnidad.

Conocida como la “vigilia de los príncipes”, esta tradición se remonta a 1936, cuando los cuatro hijos de Jorge V montaron guardia sin avisar en torno a su ataúd. Carlos y sus hermanos ya velaron el féretro el lunes en Escocia, donde la monarca falleció a los 96 años el 8 de septiembre cuando se encontraba en su residencia veraniega de Balmoral.

En aquella ocasión, Andrés no vistió su uniforme militar, un honor del que la propia reina le había privado en vida debido a un escándalo sexual. Pero el viernes, una excepción le permitió lucir sus galas.

*Con información de AFP y EP.