Fueron unos siete segundos de un video del que dice, se arrepentirá toda la vida, tras tener que renunciar. Sucedió en Cleveland, Ohio, Estados Unidos y, en días recientes, se conoció el resultado del panel que llevó a cabo la investigación.

Ogden llevaba 17 años trabajando para la Policía de Cleveland. Al momento del registro del teléfono móvil personal de la expolicía, se encontraron también 72 fotografías y cinco videos de información policial, entre las que había imágenes de pruebas que no debían estar guardadas en su teléfono personal.

De acuerdo con la mujer, lo hacía para facilitar su trabajo, pero el cuerpo de Policía dijo que esto violaba la confidencialidad al guardar esa información en su teléfono.

La mujer compartió imágenes confidenciales de su trabajo

Ogden habría enviado a uno de sus compañeros la imagen de un agresor sexual, incluyendo todos los datos personales registrados. De acuerdo con el oficial a cargo de juzgar los hechos, Mr. Ley-Morgan, “no hace falta decir que si los datos personales cayeran en las manos equivocadas, el potencial de daño está claramente ahí”, en declaraciones compartidas por el diario británico Daily Mirror.

Sobre 10 de las imágenes por las que la mujer fue interrogada, su respuesta fue que lo hizo porque las consideraba “graciosas”, dijo que las compartió a otro oficial, pero sin aclarar el nombre de la persona que las recibió.

“No debería estar distribuyendo este tipo de imágenes, ni a otro oficial ni a nadie”, afirmó el oficial a cargo de la investigación.

Del total de 72 fotografías tomadas por la oficial, 34 se clasificaron como ‘rojas’, ya que incluyen identificación personalizada, datos de contacto, fecha de nacimiento y otros detalles que podrían provocar efectos impredecibles en manos de otras personas.

Aclaraciones sobre el video sexual

Aunque la mujer se declaró arrepentida sobre el video sexual del que se le acusa haber compartido, aclaró que lo había hecho en su descanso, en una de sus comidas, y no durante el tiempo de turno en que debía estar trabajando.

También manifestó sentirse totalmente arrepentida y avergonzada por el video. “No creo haber experimentado una vergüenza y un bochorno como este”, dijo, según el diario británico Daily Mail. Además, añadió, “ojalá no lo hubiera hecho. Fue un momento de cinco a siete segundos, del que me arrepentiré el resto de mi vida”.

Una larga carrera en la policía

Ogden se incorporó al cuerpo de Policía en 2004 y recibió varias felicitaciones durante su carrera, declaró sentirse orgullosa de seguir “los pasos de mis padres”, dando a entender que su trabajo seguía una vocación familiar.

“Me encantaba la mayor parte del tiempo... Me encantaba formar parte de un equipo, me encantaba marcar la diferencia en la vida de la gente. Me sentí muy orgullosa, era un momento de manos en el corazón (una expresión de orgullo) ponerme el uniforme cada día”, dijo durante la audiencia.

Además, según el Daily Mirror, la mujer aclaró que se había sentido presionada para renunciar, y que no había sido una decisión fácil de tomar, porque se sentía orgullosa de su carrera y fue una tristeza tener que renunciar.

“Estoy destrozada, si pudiera volver atrás en el tiempo y cambiar mis acciones, lo haría. No creo que pueda expresar con palabras lo mucho que lo siento. Llevo 20 meses despierta por la noche pensando que debería haber hecho esto, que debería haber hecho aquello”. La audiencia fue realizada recientemente, pero los hechos sucedieron hace un tiempo.