Una tragedia aeronáutica enluta este miércoles, 18 de enero de 2023, a la provincia argentina de Chaco, luego de que en horas de la mañana una aeronave con cinco ocupantes se precipitara a tierra causando la muerte a todos los que se encontraban a bordo.
Según precisan medios locales, la aeronave accidentada era una avioneta que había sido hurtada este mismo miércoles en inmediaciones de un aeroclub de la ciudad de Villa Ángela.
El accidente de la aeronave se presentó apenas 7 kilómetros después de haber despegado del aeroclub, impactando contra un campo baldío en horas de la madrugada, y derivando en la muerte de la totalidad de las personas que iban en su interior.
El vehículo siniestrado corresponde a un avión Cessna, modelo 206, un monomotor que incluso está diseñado solamente para cuatro ocupantes.
De acuerdo con lo expuesto por medios locales de la provincia de Chaco, la causa del accidente se debió al aparente desconocimiento por parte de los ladrones del funcionamiento del aeroplano, pues este se vino a tierra debido a que quien lo operaba había olvidado activar la válvula que permite el paso de combustible (nafta), haciendo que el motor se detuviera por ausencia de este.
Expertos advierten que la referida válvula se encontraba oculta, razón por la que solo los conocedores de la aeronave sabían dónde estaba ubicada, y ahora son protagonistas de una lamentable tragedia.
En ese mismo sentido, los expertos destacaron que la tragedia pudo haber sido mayor, si no es porque la persona responsable de pilotear la aeronave la direccionó hacia un espacio baldío, evitando colisionar en un sector habitado, lo que hubiese representado eventualmente un mayor número de víctimas y afectaciones.
Tras la tragedia ocurrida, al lugar del siniestro acudieron las autoridades locales, en compañía de los cuerpos policiales y peritos que asumieron la investigación del robo y su lamentable desenlace.
Primeras informaciones detallan que la muerte de uno de los ocupantes se originó de manera instantánea debido a las heridas propias de la colisión, y a que la fuerza del impacto ocasionó que este saliera despedido fuera del avión, mientras que los otros cuatro ocupantes perecieron calcinados debido al incendio que derivó del impacto en tierra.
Previo a que la aeronave colisionara, según detallan testigos, las autoridades ya habían sido alertadas de la anomalía que presentaba un avión que estaba perdiendo altura, y que finalmente se estrelló contra un espacio baldío, derivando en la proliferación de las llamas.
De acuerdo con las declaraciones de las autoridades locales, citadas por medios nacionales en Argentina, uno de los principales retos que reviste la investigación emprendida refiere a la tarea de la identificación de los cadáveres, en tanto el alto grado de afectación debido al incendio los hace difícilmente identificables.
De momento, las primeras informaciones divulgadas respecto al accidente han precisado que el avión hurtado y estrellado era propiedad de un empresario del sector ganadero y agrícola conocido como Roger Martin.
En ese mismo sentido, se presume que los individuos que hurtaron y estrellaron la avioneta corresponden a miembros de una organización criminal dedicada al narcotráfico, entidad que a su vez tendría filiación paraguaya.
Un aspecto que, según medios locales de Argentina podría corroborar la nacionalidad extranjera de algunos o todos los ocupantes fallecidos es la presencia de monedas de circulación paraguaya, además de la aparición de prendas de vestir o ropa referente a un club de fútbol perteneciente a ese país, más precisamente Cerro Porteño.
Al interior de la aeronave siniestrada también fue identificada una pistola calibre 40, a la vez que un teléfono satelital, que son analizados actualmente en el marco del intento por esclarecer lo ocurrido.
Durante el robo de la aeronave, los delincuentes habrían forzado una de las puertas del aeroclub, para posteriormente ingresar al hangar a través de la ruptura de puertas y candados.
En medio de la operación de robo, los delincuentes también desactivaron las cámaras de vigilancia; no obstante, las imágenes captadas por un dispositivo no detectado por los delincuentes es actualmente material de estudio por parte de las autoridades, para entre otras cosas, establecer la identidad de los fallecidos delincuentes.
Este robo con final desastroso para los delincuentes se suma a otros robos de aviones ligeros reportados en las últimas semanas, entre los que se destaca el hurto de un avión en el aeroclub Resistencia el pasado 25 de diciembre.
En ese caso particular, se presume que la aeronave hurtada fue dirigida a Brasil y se encontraría en poder de grupos dedicados a hechos delictivos que la estarían empleando para transporte de droga.