La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó este lunes que un representante de su gobierno asistirá el próximo viernes 10 de enero a la posesión mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, pese a las denuncias de fraude en las elecciones del pasado 28 de julio en el país suramericano.

“En el caso de Venezuela irá un representante a la toma de protesta, no vemos por qué no deba ser así, le corresponde a las y los venezolanos, no a México, definir”, manifestó la mandatario mexicana durante una conferencia de prensa.

La respuesta de Sheinbaum se dio tras la pregunta de un periodista, en donde le cuestiona por la posición que había adoptado durante el proceso de transición del Gobierno, en el que pidió que se dieran a conocer las actas de la elección en Venezuela.

Sin embargo, al ser cuestionada sobre esto, la mandataria de los mexicanos manifestó de forma enfática que la postura de su gobierno será “la postura que está en la Constitución con todos los gobiernos del mundo, la autodeterminación de los pueblos”.

A finales de diciembre, la jefe de Estado había adelantado que no acudiría a la toma de posesión de Nicolás Maduro, el próximo 10 de enero en Caracas, pero que sí lo haría un representante, o bien el embajador en Venezuela, Leopoldo de Gyvés.

“Va a ir una representación o el propio embajador que está en Venezuela”, respondió la mandataria mexicana cuando se le consultó por la presencia mexicana en la toma de Maduro, a quien una parte de la comunidad internacional insta a reconocer el supuesto triunfo de Edmundo González en las elecciones.

Hace apenas unos días la propia Sheinbaum reveló que no habían recibido invitación para ese momento a la asistir a la ceremonia el 10 de enero, fecha en la que el opositor González, ahora bajo asilo en España, también pretende tomar posesión.

A diferencia de otros líderes de la región, como Gustavo Petro en Colombia y Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, quienes han instado a las partes en Venezuela a hacer públicas las actas electorales, Sheinbaum defendió la postura históricamente neutral de México de no interferir en los asuntos de otros países.

La postura de la presidenta de México había sido cuestionada por el líder opositor venezolano Leopoldo López, quien criticó el anuncio de enviar un representante de su país a la posesión de Nicolás Maduro, que está programada para el próximo 10 de enero.

López calificó como “terrible” y una “aberración” la decisión de la mandataria, de quien aseguró se está “arrimando a un dictador con miles de presos políticos” por “ceguera” ideológica.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum aseguró que enviará un representante a la posesión de Nicolás Maduro. | Foto: Suministrada

“Terrible posicionamiento de la presidenta Claudia de México. Se está arrimando a un dictador que tiene miles de presos políticos, está investigado por la CPI y la ONU por cometer crímenes de lesa humanidad (es decir: desapariciones forzadas, torturas, violaciones, asesinatos por razones políticas)”, dijo López en un mensaje publicado en la red X a finales de diciembre.