En las últimas horas despegaron de la base militar de Catam dos aviones de la Fuerza Aérea con ayudas humanitarias para los damnificados tras el terremoto que sacudió la isla de Haití. Para la labor humanitaria la Fuerza Aérea dispuso de dos aviones, un Hércules C-130 y un Casa C-295, que además de llevar las ayudas movilizó personal de la Unidad de Gestión del Riesgo.
La asistencia que envío Colombia consiste en raciones de campaña, agua potable, kits de alimentos y aseo, sábanas, toldillos, carpas y demás elementos que serán entregados a la población afectada.
Según la Fuerza Aérea, en los próximos días se estarán transportando más ayudas humanitarias; adicionalmente, la aeronave Casa C-295 realizará un puente aéreo dentro del territorio haitiano, cumpliendo misiones de transporte dentro de los Cayos, que resultaron gravemente afectados luego del sismo.
Por su parte el primer ministro de Haití, Ariel Henry, hizo un llamado a la unidad de la nación para ayudar a las personas afectadas e informó que el gobierno declaró al país en estado de emergencia.
“Haremos los arreglos necesarios para ayudar a las personas afectadas por el terremoto en la Península Sur. Debemos mostrar mucha solidaridad con respecto a la emergencia. El gobierno declarará el estado de emergencia. Actuaremos rápido”, escribió en su cuenta de Twitter.
Según uno de los reportes más recientes, entregado por las autoridades locales, al menos 1.297 personas fallecieron como consecuencia del sismo de magnitud 7,2 que golpeó a Haití.
Además, señalaron que más de 2.800 personas resultaron heridas en el terremoto registrado en la mañana del sábado, informó la agencia de protección civil del país.
El movimiento telúrico, de magnitud 7,2 que hizo temblar las casas y obligó a la población a buscar protección, tuvo su epicentro a unos 160 km de la capital haitiana, Puerto Príncipe.
Uno de los habitantes afectados relató a medios internacionales que “Las casas y los muros que las rodean se han derrumbado. El tejado de la catedral se derrumbó”, dijo Job Joseph, residente de la ciudad de Jeremie, en el extremo occidental de Haití.
Por su parte el presidente Iván Duque, indicó que “nos solidarizamos con el pueblo de Haití y lamentamos profundamente lo ocurrido luego del terremoto. Con el apoyo de la @FuerzaAereaCol, mañana (15.08.2021) se desplazará el equipo #USARCOL1 especializado en búsqueda y rescate, y 18 toneladas de equipos para cumplir su misión: salvar vidas”, escribió el mandatario de los colombianos en Twitter.
En la emergencia en la isla los equipos de rescate corrieron contrarreloj para encontrar sobrevivientes, mientras que el servicio de protección civil tuiteó que los esfuerzos de rescatistas profesionales y de numerosas personas “han llevado a que muchos hayan sido sacados de los escombros”.
“Muchas casas están destruidas, hay muertos y muchos están en el hospital” dijo a la AFP Christella Saint Hilaire, quien vive cerca del epicentro.
Hospitales en las regiones más afectadas ya enfrentaban dificultades para proveer atención de emergencia y al menos tres centros de salud en las localidades de Pestel, Corailles y Roseaux estaban totalmente abarrotados de pacientes, según Chandler.
A su turno, el Ministerio de Salud local envió rápidamente personal y medicinas a la península del sureste, pero el arribo está condicionado por la inseguridad que campea en el país más pobre de América.
El único camino que une a la capital con la zona sur del país pasa por Martissant, un área controlada desde junio por bandas armadas que bloquean el libre tránsito.
“Todos sabemos que tenemos un problema en Martissant”, admitió el primer ministro Ariel Henry a la prensa local, pero señaló que se siguen haciendo esfuerzos para ayudar a los damnificados que dejó el terremoto.