Son las 4:17 de la mañana del martes en Turquía, Isabel García, una bumanguesa que vive desde hace dos años en el país, hace días que no puede dormir por la gripa, pero un temblor jamás visto ante sus ojos la sobresaltó de la cama, al igual que a su esposo, un turco que conoció en una aplicación de citas hace un buen tiempo. Un terremoto de magnitud 7,8 azotaba a la nación, en la que apunta a ser la peor tragedia de su historia.

Para la escala sísmica de Mercalli, tiene una puntuación de 9 de 12 grados posibles, siendo calificado como muy violento. Miles de personas quedaron enterradas bajo los escombros casi de inmediato mientras dormían. Pero la tragedia no terminó ahí: a la una de la tarde, otro fuerte sismo afectó al país, esta vez de magnitud 7,5, volviendo a sepultar a cientos de personas, entre las cuales había ciudadanos que buscaban a sus familiares que estaban debajo de los edificios.

Turquía y Siria viven su peor desastre natural de la historia. El alcance de los dos terremotos aún es incalculable. | Foto: AFP or licensors

Isabel y su esposo tuvieron la fortuna de estar a un par de horas del epicentro de los terremotos, por lo cual salieron intactos, pero en donde viven tuvieron que ver edificios destruidos y personas heridas en las calles, sin contar con el impacto de las dramáticas imágenes que dejaron los movimientos telúricos a lo largo del país. “Con mi esposo lloramos al ver que muchas personas buscan entre los escombros a sus amigos, a su familia, ver tantos niños salir gateando entre los escombros”, cuenta la colombiana a SEMANA.

Para todos los turcos y habitantes del país es desgarrador ver cómo parte de la nación está totalmente rota por la devastación del sismo, que al cierre de esta edición deja más de 20.000 muertos entre ambos países. Mientras tanto, la situación en el sur de Turquía sigue siendo crítica: no hay electricidad, no hay agua y los sobrevivientes están prácticamente incomunicados al no tener señal de internet, por lo cual cualquier tipo de comunicación es muy difícil.

Isabel García, colombiana residente en Turquía.

Isabel García contó que tiene un par de allegados en la zona más afectada por el sismo, pero que ha sido imposible cualquier tipo de contacto y no sabe absolutamente nada de ellos, por lo que las noticias de los sobrevivientes son realmente escasas.

SEMANA también estuvo al tanto del caso de Johanna Carolina Millán, una colombiana fallecida durante el desastre natural. Ella ejercía como guía turística y por un viaje de trabajo se encontraba en Adiyaman, muy cerca del centro de la tragedia. Erhan Kap, ciudadano turco esposo de Millán, confirmó el deceso de la mujer, que primero había sido encontrada con vida dentro de los escombros.

La tragedia sigue y solo semanas después se podrá saber el alcance de los terremotos en Turquía y Siria. | Foto: 2023 Anadolu Agency

Según testimonios de familiares de Millán, la última vez que hablaron con ella fue el domingo, un par de días antes de la tragedia. Después de que conocieron del terremoto, estuvieron toda la semana llamando a hospitales de Ankara, Mersin y Estambul, hasta que, tristemente, les dieron la noticia del fallecimiento de Johanna Carolina el jueves en horas de la mañana.

Para Isabel García, a pesar del desastre y de que los temblores son bastante comunes, no se le ha pasado la cabeza salir del país por el terremoto, aunque en algún momento quiere volver a Colombia junto con su esposo. Pero por ahora quieren ayudar a quien lo necesite. “Este es un país bendecido a pesar de todo lo que está sucediendo, los turcos son personas muy unidas, muy amables y muy humanitarias. Yo sé que esto se va a superar”, contó la colombiana.

La tragedia sigue y solo semanas después se podrá saber el alcance de los terremotos en Turquía y Siria, que han destruido no solo ciudades, sino la moral de muchos de sus habitantes.

Siria: El lado olvidado del desastre y lo difícil que es enviar ayuda

Las viviendas y la infraestructura de Siria son más débiles que las que existen en Turquía. | Foto: AFP or licensors

Siria fue el otro país que se vio afectado por esta tragedia. Pero allá se vive otra tragedia en particular. La nación sufre una guerra civil desde hace 12 años que ha destruido buena parte del territorio. Ahora, con el sismo, el desastre se lleva consigo miles de vidas, heridos y millones de dólares en daños materiales. Sin embargo, el problema más grande es que por la incomunicación que ha traído la guerra, es más difícil que nunca enviar ayuda humanitaria al país y la cooperación se hace casi imposible en un territorio donde el Estado no ejerce en muchas zonas. Además, las viviendas y la infraestructura son mucho más débiles que las que existen en Turquía, por lo que el impacto en muchas partes de Siria ha sido dramático e intenso, como si se hubiera dado en el epicentro mismo del movimiento telúrico.

Reconstrucción: Una tarea titánica para turcos y sirios

El humo negro de un incendio se eleva sobre el centro de Iskenderun, luego de un terremoto en Turquía. Serday Ozsoy/Depo | Foto: REUTERS

Uno de los aspectos más difíciles de todo el desastre ocurrido será cómo podrán levantarse los turcos después del terremoto, ya que los daños materiales suman miles de millones de dólares, por lo que volver a poner en pie las estructuras caídas del país será todo un desafío del que ya se empiezan a hacer cálculos y posibilidades. Las regiones afectadas representan el 15 por ciento de la población y el 9 por ciento del PIB de toda Turquía. Además, expertos aseguran que depende de qué tanto se haya afectado la infraestructura de alcantarillado y electricidad, algo que a día de hoy es imposible de calcular hasta que se haga una evaluación completa de los daños.

De igual manera, la ayuda internacional desempeñará un papel crucial para la reconstrucción de Turquía. Por ejemplo, el Banco Mundial anunció que donará 1.780 millones de dólares para el país, que estarán destinados a la infraestructura básica destruida por el sismo, otros países también anunciaron ayudas. Mientras que en Siria se ruega por el levantamiento de las sanciones para que las ayudas internacionales puedan llegar a la nación.

Desgarrador: La triste imagen que da la vuelta al mundo

En todo el planeta se hace eco de Mesut Hancer, un hombre turco que pudo salvarse del derrumbe de su casa en Kahramanmaras. Tristemente, su hija Irmak, de 15 años, no tuvo la misma suerte y falleció bajo los escombros después de que la estructura se viniera abajo a las cuatro de la mañana, todo mientras ella dormía. La imagen conmovió porque, sentado pacientemente, en ningún momento soltó la mano de su hija, a la espera de que llegaran los cuerpos de rescate para sacar el cuerpo. Según testimonios, el hombre estuvo allí durante horas, pasando un día completo hasta que los equipos de rescate pudieron sacar a la menor de entre los escombros, en medio del gran dolor del padre por la pérdida de su hija.

Víctimas: El sismo dejó decenas de miles de fallecidos y heridos. Estas son las cifras al cierre de esta edición:

La gente observa cómo los rescatistas y los civiles buscan sobrevivientes bajo los escombros de los edificios derrumbados en Nurdagi, en el campo de Gaziantep. (Photo by Zein Al RIFAI / AFP) | Foto: AFP or licensors

21.000 personas han muerto por el terremoto en Turquía.

3.300 personas han muerto por el sismo en Siria.

78.000 son las personas heridas en Turquía.

60.000 personas forman parte de los equipos de rescate en toda Turquía.

Daños: Además de las pérdidas humanas, los daños en ambos países serán multimillonarios.

Una vista aérea muestra edificios derrumbados y dañados después de un terremoto en Hatay, Turquía, 7 de febrero de 2023. | Foto: REUTERS

6.000 edificios, aproximadamente, fueron los que se derrumbaron en Turquía durante el sismo.

4.000 millones de dólares podrían sumar los daños materiales en Turquía.

1.780 millones de dólares serán donados por el Banco Mundial para la reconstrucción de Turquía.

45 países anunciaron el envío de ayuda hacia Turquía y Siria.