Jeffersson Arango Castellanos, de 36 años de edad, fue sentenciado a 48 años de cárcel por su participación en el secuestro de dos soldados del Ejército de Estados Unidos, quienes se encontraban en Colombia prestando un servicio temporal.

Según la información publicada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, el condenado y sus cómplices incapacitaron, secuestraron y atacaron a dos soldados en Bogotá para robarles sus pertenencias.

La noche del 5 de marzo de 2020, las dos víctimas fueron a un sector de entretenimiento de Bogotá para ver un partido de fútbol y después visitaron un bar, donde Arango Castellanos “incapacitó a las dos víctimas colocando drogas, inclusive benzodiazepinas, en sus bebidas”, dice la entidad del Gobierno norteamericano.

Uno de los delincuentes le habría suministrado la droga en el trago. | Foto: Getty Images

Con los soldados bajo los efectos de las drogas, los cómplices junto con Arango decidieron robar las billeteras, tarjetas de crédito y teléfonos celulares. Los ladrones aprovecharon el momento para utilizar las tarjetas bancarias de los soldados norteamericanos y hacer diferentes compras e incluso retirar dinero en efectivo.

“Las dos víctimas perdieron el conocimiento hasta el día siguiente, momento en el que ya habían sido separadas”, asegura el comunicado emitido por el departamento de Justicia.

En mayo de 2023, el perpetrador del secuestro fue extraditado a Estados Unidos y se declaró culpable por cada uno de estos delitos: “secuestro de una persona protegida internacionalmente, concierto para secuestrar a una persona protegida internacionalmente, agredir a una persona protegida internacionalmente y concierto para agredir a una persona protegida internacionalmente”.

Los delincuentes retiraron dinero de las tarjetas bancarias de las víctimas. | Foto: SEMANA

Finalmente, la fiscal general principal adjunta Nicole M. Argentieri, jefa de la División Penal del Departamento de Justicia; el fiscal federal Markenzy Lapointe para el Distrito Sur de Florida, y el agente especial a cargo Jeffrey B. Veltri de la oficina local del FBI en Miami hicieron el anuncio.

“La Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia, la Agregaduría Judicial de la Sección de Narcóticos y Drogas Peligrosas en Bogotá y el Servicio de Alguaciles de los Estados Unidos brindaron asistencia significativa para asegurar el arresto y la extradición del acusado. Los Estados Unidos también agradecen a las autoridades colombianas del orden público por su valiosa asistencia”, dice la misiva publicada en las últimas horas.

Los abogados litigantes Clayton O’Connor y Elizabeth Nielsen, de la Sección de Enjuiciamientos Especiales y Derechos Humanos de la División Penal, y la fiscal federal adjunta Bertila L. Fernández, para el Distrito Sur de Florida, procesaron el caso.

“Una acusación es simplemente una acusación. Se presume que todos los acusados son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad, más allá de toda duda razonable en un tribunal de justicia”, había escrito en su comunicado la oficina de abogados del Distrito Sur de la Florida.

Nicole M. Argentieri, jefa de la División Penal del Departamento de Justicia. | Foto: X/@BrightOcular