En una intervención extraordinaria, tras la gran propagación del nuevo coronavirus en toda Europa, la canciller de Alemania, Angela Merkel, aseguró que la lucha contra el nuevo coronavirus constituye "el mayor desafío" que haya conocido Alemania desde la Segunda Guerra Mundial. La intervención fue de suma importancia, pues al margen del tradicional discurso de fin de año, es la primera vez que la canciller emplea este formato para hacer un discurso ante los ciudadanos desde que llegó al poder en 2005. "Desde la reunificación alemana... no, desde la Segunda Guerra Mundial, no ha habido un desafío para nuestro país que dependa tanto de nuestra solidaridad común", declaró la canciller durante un discurso dirigido a la nación, retransmitido por televisión. "Creo firmemente que lograremos tener éxito en esta tarea si todos los ciudadanos la consideran verdaderamente como propia", recalcó la mandataria, quien recordó las medidas impuestas en Alemania y en Europa, donde se restringió la libre circulación para atajar la pandemia.
Unas restricciones que, "en democracia, nunca deberían decidirse a la ligera y solo de forma provisional", señaló. "Pero en este momento son indispensables para salvar vidas", destacó. Asimismo, hizo "un llamado" para que se respeten las reglas de distanciamiento en Alemania, donde, por el momento, no se ordenaron medidas de confinamiento, como sí se hizo en otros países como Francia, Italia y España.
Hasta la fecha, la epidemia de COVID-19 causó entre 12 y 16 muertos en el país, según balances divergentes del instituto Robert Koch y de las regiones.